Fraude por prueba de tarjetas, una forma frecuente de fraude con tarjetas de crédito, es cuando los actores fraudulentos validan la usabilidad de una tarjeta de crédito. Este fraude suele implicar la ejecución de varias transacciones de bajo valor en varios sitios web. Estas pequeñas transacciones suelen pasar desapercibidas para los titulares de tarjetas y los sistemas de detección de fraude, que tienden a centrarse en patrones de gasto más grandes e irregulares. Quienes cometen el fraude usan estas transacciones de prueba para verificar que la tarjeta sigue activa, no tiene ningún aviso y no se ha cancelado por robo; también quieren confirmar que la tarjeta tiene un límite de crédito suficiente para realizar compras.
Este tipo de fraude utiliza procesos de transacciones legítimos para evitar la detección. Los estafadores a menudo se dirigen a sitios web conocidos por procesar un gran volumen de transacciones de bajo valor, ya que así es menos probable que activen alertas. Una vez que una tarjeta pasa esta fase inicial de "prueba" y se considera activa y desbloqueada, su valor para el estafador aumenta exponencialmente. Es posible que ellos mismos usen la tarjeta para hacer compras más importantes o que vendan los datos de la tarjeta en el mercado ilegal.
Se estima que el fraude en el e-Commerce tendría un coste de más de 48 mil millones de dólares en todo el mundo en 2023, según un informe de Juniper Research. La simplicidad del fraude de prueba de tarjetas, que requiere poco más que una lista de números de tarjetas robadas y acceso a Internet, lo convierte en el método preferido entre los ciberdelincuentes. La naturaleza digital de estas transacciones también significa que se pueden realizar desde cualquier lugar, lo que complica la tarea de las fuerzas y cuerpos de seguridad y aumenta la dificultad para las empresas y entidades financieras que intentan proteger la información financiera de sus clientes. A continuación encontrarás una guía de lo que las empresas deben saber sobre este tipo de fraude y cómo protegerse contra él.
¿De qué trata este artículo?
- ¿Cómo funciona el fraude de prueba de tarjetas?
- Cómo afecta el fraude de las pruebas de tarjetas a empresas y clientes
- Señales de ataques de fraude de prueba de tarjetas
- Cómo proteger tu empresa contra el fraude por prueba de tarjetas
- Cómo responder a los ataques de fraude de prueba de tarjetas
¿Cómo funciona el fraude de la prueba de tarjetas?
El fraude de prueba de tarjetas opera a través de un proceso relativamente simple. Los estafadores obtienen números de tarjetas robados, los prueban para asegurarse de que funcionan y luego los usan. Aquí tienes más detalles sobre cómo se desarrolla esto:
Los estafadores adquieren números de tarjetas de crédito robadas: El proceso comienza cuando los estafadores adquieren números de tarjetas de crédito robadas. Estos pueden provenir de varios medios, como filtraciones de datos o estafas de phishing, aunque a veces se adquieren en los mercados de la web oscura. Una vez en posesión de estos números, los estafadores inician la fase de prueba.
Prueban las tarjetas: La fase de prueba consiste en realizar transacciones en sitios web. Estas transacciones suelen pasar desapercibidas para los mecanismos típicos de detección de fraudes, que están más preparados para detectar compras grandes o inusuales. Los actores fraudulentos a menudo se dirigen a sitios conocidos por sus microtransacciones, como los que venden servicios digitales o pequeñas donaciones benéficas, porque es menos probable que estas plataformas tengan medidas de detección del fraude.
Confirman qué tarjetas están activas: La clave para los estafadores es confirmar que la tarjeta de crédito está activa y que aún no se ha denunciado su robo. Observan si estas pequeñas transacciones se realizan con éxito; si se aprueba la transacción, eso indica que la tarjeta aún está operativa. En los sitios web en los que la información adicional (por ejemplo, las direcciones de facturación) no se verifica estrictamente, este proceso se vuelve más fácil.
Utilizan tarjetas viables para realizar compras fraudulentas: Una vez que se verifica una tarjeta, esta cobra más valor. Ahora, el estafador puede usarla con confianza para compras no autorizadas de mayor tamaño o vender los datos de la tarjeta a terceros. Existe una importante demanda ilegal en el mercado de números de tarjetas de crédito que han sido verificados como activos y utilizables.
La facilidad de este método de fraude reside en su sencillez y en la naturaleza digital de las transacciones, lo que permite a los autores operar desde cualquier lugar. Este problema generalizado plantea un desafío para las empresas y las entidades financieras: deben adelantarse a los ataques con supervisión y estrategias avanzadas capaces de detectar y prevenir tales actividades fraudulentas y, de este modo, proteger a sus clientes y mantener intacta la confianza.
Cómo afecta el fraude de las pruebas de tarjetas a empresas y clientes
El fraude en las pruebas de tarjetas afecta a los clientes y plantea una serie de desafíos para las empresas. Aunque probablemente sea bastante obvio cómo estos ataques podrían afectar a las víctimas, en esta lista vemos dónde se experimenta el daño con mayor frecuencia:
Repercusiones en las empresas
Pérdidas económicas: Las transacciones no autorizadas pueden generar pérdidas financieras directas. Las empresas asumen el coste de los contracargos cuando los clientes disputan cargos fraudulentos.
Aumento de los costes operativos: Hacer frente al fraude exige recursos, lo que aumenta los costes operativos. La implementación y el mantenimiento de sistemas avanzados de detección de fraude también aumentan los gastos.
Daño reputacional: Los incidentes de fraude, si son frecuentes, pueden dañar la reputación de una empresa. La pérdida de confianza de los clientes puede generar problemas en términos de reducción de ventas y retención de clientes.
Mayor escrutinio por parte de los emisores y procesadores de tarjetas: Los altos niveles de fraude pueden dar lugar a un mayor escrutinio y sanciones por parte de los emisores de tarjetas de crédito y procesadores de pagos. Esto puede dar lugar a comisiones de procesamiento más elevadas o, en casos extremos, a la pérdida de la capacidad de procesar pagos con tarjeta de crédito.
Repercusiones en los clientes
Inconvenientes económicos: Las víctimas del fraude por prueba de tarjetas se enfrentan a la molestia de disputar cargos y conseguir que se emitan nuevas tarjetas. Aunque los clientes no suelen ser responsables de los cargos fraudulentos, resolver estos problemas puede llevar mucho tiempo.
Preocupaciones de privacidad: Darse cuenta de que los datos de la tarjeta han sido robados y mal utilizados puede causar ansiedad sobre la privacidad y la seguridad.
Posibilidad de un mayor daño financiero: Aunque la prueba de tarjetas implica pequeños importes, puede ser un precursor de transacciones no autorizadas de mayor volumen. Una vez que se verifique que los datos de la tarjeta están activos, pueden utilizarse para cometer fraudes con importes más grandes o venderse en el mercado ilegal.
Impacto en la calificación crediticia: En algunos casos, las actividades fraudulentas prolongadas que pasan desapercibidas pueden afectar a la calificación crediticia del cliente. Resolver estos problemas con las entidades de crédito puede ser un proceso largo.
Síntomas de los ataques de fraude de prueba de tarjetas
Es fundamental que las empresas sepan reconocer cuándo se sufre un ataque de prueba de tarjetas y reaccionar ante él. Así podrán proteger el negocio y a sus clientes. Dos pasos clave para ello son conocer los síntomas típicos e implantar sistemas de vigilancia eficaces. Veamos los indicadores más habituales que delatan un posible fraude de este tipo para tu empresa:
Multitud de transacciones muy pequeñas: una serie de transacciones de bajo valor, a menudo muy seguidas, es un síntoma muy llamativo y típico. Normalmente, las cantidades involucradas son muy modestas, para no despertar sospechas.
Uso de varias tarjetas distintas: si se detectan intentos repetidos de utilizar distintos números de tarjetas procedentes de un mismo servicio o dirección IP, hay que dar la alerta, pues suele suceder cuando alguien se propone poner a prueba un lote de números de tarjetas.
Transacciones fallidas: un número muy elevado de transacciones rechazadas también es un detalle sospechoso y que apunta la posibilidad de una prueba de tarjetas, ya que los ciberdelincuentes a menudo tienen que usar números de tarjeta no válidas o caducadas.
Incoherencias en los datos de facturación: aquellas transacciones donde la información que el cliente debe facilitar para la facturación no coincide exactamente con los datos de la tarjeta son sospechosas, pues la disparidad podría deberse a una actividad fraudulenta.
Saber distinguir las señales que apuntan a un fraude de prueba de tarjetas e implantar sistemas de vigilancia eficaces ayuda a defenderse de esta clase de estafas. Con estas medidas se protegen los intereses financieros de la empresa y también los datos personales y la confianza de su clientela. La cuestión clave es moldear un entorno seguro para las transacciones, sin descuidar la vigilancia ni dejar de adaptarse a las nuevas tácticas de fraude que vayan surgiendo.
¿Cómo deberías proteger tu negocio frente al fraude de prueba de tarjetas?
Proteger tu negocio de las pruebas de tarjetas exige contar con una buena combinación de medidas de seguridad, herramientas avanzadas y mejores prácticas para el procesamiento de pagos. Se trata de estrategias diseñadas para identificar y amortiguar el riesgo de que se produzcan fraudes, pero sin renunciar a que los clientes legítimos disfruten de una experiencia agradable.
Herramientas y medidas de seguridad efectivas
Usar un servicio de verificación de domicilio (AVS): los AVS, también llamados sistemas de verificación de domicilio, comparan la dirección postal de facturación que ha indicado el usuario con la dirección almacenada en los registros de la compañía emisora de la tarjeta de crédito. Las incoherencias son sospechosas y podrían apuntar a la existencia de un fraude.
Implementar comprobaciones del valor de verificación de la tarjeta (CVV): exigir que se comunique el código CVV para las transacciones es útil porque permite confirmar si la persona que efectúa la compra tiene acceso físico a la tarjeta. Así se reduce el riesgo de usos fraudulentos de los números de tarjetas que se puedan haber obtenido a través de Internet.
Establecer límites para las transacciones: fijar unos límites para el número de transacciones o el importe monetario máximo permitido para cada tarjeta dentro de un plazo determinado son dos mecanismos útiles para prevenir muchos intentos de fraude.
Instalar herramientas avanzadas de detección de fraude: es aconsejable invertir en herramientas que aprovechen el machine learning y la inteligencia artificial para analizar los patrones de las transacciones y subrayar las anomalías que sean sospechosas y típicas de la prueba de tarjetas.
Emplear la autenticación en varios pasos: para las transacciones de aspecto sospechoso, desplegar una capa más de autenticación ayudará a disuadir a los ciberdelincuentes.
Mejores prácticas para el procesamiento de pagos
Monitoriza y analiza los patrones de transacciones: conviene revisar periódicamente los datos de las transacciones para buscar patrones inusuales que apunten a una posible prueba de tarjetas. Por ejemplo, si se registran varias transacciones muy pequeñas seguidas en un período breve.
Actualiza y mejora los sistemas de seguridad con regularidad: para que los estafadores no tomen la delantera, actualiza constantemente el software y los protocolos de seguridad.
Proporciona formación a la plantilla: asegúrate de que el personal empleado conozca las señales de las pruebas de tarjetas y sepa cómo reaccionar.
Respeta el cumplimiento del estándar de seguridad de datos del sector de pagos con tarjeta (PCI DSS):
atenerse a los requisitos del estándar PCI DSS es crucial para proteger los sistemas de procesamiento de pagos.Mantén la transparencia en la comunicación con tu clientela: debes informar a tus clientes acerca de las medidas de seguridad e invitarlos a denunciar cualquier actividad sospechosa relacionada con sus transacciones.
Implementar sistemas de monitorización para la detección temprana
Implantar unos sistemas de vigilancia potentes es importante para detectar a tiempo las pruebas de tarjetas. Deberían ser capaces de:
Analizar patrones de transacciones: el software de supervisión debería identificar los patrones típicos de las pruebas de tarjetas, como una rápida sucesión de transacciones muy pequeñas.
Señalar las actividades sospechosas: deberían marcar automáticamente aquellas transacciones que cumplan ciertos criterios, como múltiples intentos fallidos o incoherencias en la información de facturación.
Alertas en tiempo real: permiten reaccionar y actuar de inmediato cuando se detecta un posible caso de prueba de tarjetas. Una respuesta ágil ayuda a evitar más transacciones sin autorización.
Parámetros personalizables: cada negocio es un mundo y tiene sus particularidades... y lo mismo pasa con los tipos de transacciones que procesan. El sistema de supervisión debería admitir la configuración personal para adaptarse a necesidades y perfiles específicos del negocio.
Integración con herramientas de prevención de fraude: integrar los sistemas de supervisión con otras herramientas de prevención de fraude como las funciones de comprobación de CVV y AVS ayuda a configurar una defensa más completa y firme frente a la prueba de tarjetas y otras modalidades de estafa.
Si tu empresa combina estas medidas con las mejores prácticas, conformará un entorno más seguro que disuadirá a cualquier potencial defraudador. Es preciso mantener la vigilancia y adaptarse a las nuevas amenazas que surjan para proteger el negocio y conservar la confianza de los clientes.
¿Cómo se responde a los ataques de fraude de prueba de tarjetas?
Es fundamental responder con eficacia ante los incidentes sospechosos para limitar al mínimo los daños y recuperarse lo antes posible. Cuando se detecta un fraude de prueba de tarjetas, hay que seguir procedimientos y etapas específicos.
¿Qué pasos hay que dar cuando se detecta un fraude de prueba de tarjetas?
Revisar la transacción de inmediato y congelarla: en cuanto salte la sospecha de que se ha producido una prueba de tarjetas, hay que revisar las transacciones afectadas enseguida. Congela todas las transacciones en curso relacionadas con la sospecha de fraude para evitar que se produzcan más actividades sin autorización.
Verificación reforzada para transacciones sospechosas: si algunas transacciones arrojan sospechas pero no está totalmente claro que sean fraudulentas, implementa procesos de verificación reforzados. Quizás sea necesario comunicarte con el cliente para confirmar que la transacción es lícita o verificar su identidad con otro proceso de autenticación.
Análisis de patrones de las transacciones: ejecuta un análisis a fondo de los patrones de las transacciones para averiguar qué alcance tiene el ataque y qué método sigue. Te ayudará a identificar los orígenes y los posibles puntos débiles del sistema.
Ajuste de los parámetros de detección de fraude: basándote en el análisis, ajusta los parámetros de detección para que sean más sensibles a los tipos de actividad que se hayan observado durante el incidente. Tal vez haya que endurecer los límites a las transacciones o modificar los activadores de alertas.
Notificar procedimientos y acciones de recuperación para las empresas afectadas
Notificar a las entidades financieras y los procesadores de pagos con tarjeta: es imprescindible que informes sobre el incidente de inmediato a todas las entidades financieras con las que trabajas, incluidos bancos y procesadores de tarjetas. Seguramente cooperarán para extremar la vigilancia y detectar más actividades sospechosas o adoptarán las medidas que sean necesarias por su parte.
Denunciar ante las fuerzas policiales: si se trata de un fraude a gran escala, es aconsejable que lo denuncies ante las fuerzas del orden público. De ese modo, las autoridades podrán poner en marcha una investigación para apresar a los perpetradores.
Implicarse con profesionales especialistas en ciberseguridad: si se trata de un ataque muy sofisticado o si te preocupan las vulnerabilidades de los sistemas, consulta a expertos en ciberseguridad, que sabrán identificar cómo ocurrió el ataque y cómo prevenir otros incidentes.
Comunicación y asistencia técnica para tus clientes: debes comunicarte con los clientes afectados de una forma totalmente transparente. Explícales el incidente y aconséjales qué pasos deben dar. Por ejemplo, revisar sus extractos o informes de crédito o sustituir las tarjetas por otras nuevas.
Revisar y reforzar las medidas de seguridad: cuando haya concluido un incidente, revisa de manera pormenorizada las medidas de seguridad. Para fortalecer las defensas tal vez debas actualizar software, corregir protocolos o formar a tus empleados sobre nuevas prácticas.
Aprender del incidente y adaptarse: cada incidente es una oportunidad para aprender, aprovéchala. Analiza qué ha ocurrido, qué medidas han tenido éxito y qué áreas son susceptibles de mejorar. Corrige y adapta tus estrategias para que la empresa esté mejor preparada ante futuras amenazas.
Aquí encontrarás más información sobre cómo contribuye Stripe a proteger las empresas frente a la amenaza del fraude de prueba de tarjetas.
El contenido de este artículo tiene solo fines informativos y educativos generales y no debe interpretarse como asesoramiento legal o fiscal. Stripe no garantiza la exactitud, la integridad, la adecuación o la vigencia de la información incluida en el artículo. Debes procurar el asesoramiento de un abogado o un contador competente con licencia para ejercer en tu jurisdicción si deseas obtener asistencia para tu situación particular.