Constituir una startup significa crear una empresa como entidad jurídica propia, separada de sus propietarios. Este proceso a menudo implica presentar documentos ante el gobierno (en los Estados Unidos, generalmente la oficina del secretario de estado en tu estado) y pagar una comisión. Una vez que tu startup se constituye, queda sujeta a leyes y reglamentaciones específicas, pero obtiene ciertas ventajas, como responsabilidad limitada y acceso más fácil al capital. La constitución de tu startup puede simplificar la gestión de los impuestos, la propiedad y la responsabilidad.
A continuación, veremos los pasos clave involucrados en la constitución de una startup. Estos incluyen los beneficios de la constitución, los desafíos que puedes esperar que se presenten y los procesos involucrados. Esto es lo que debes saber.
¿Qué contiene este artículo?
- Beneficios de constituir tu startup
- Desafíos de la constitución de tu startup
- Cómo constituir tu startup
- Cómo puede ayudarte Stripe
Beneficios de constituir tu startup
Si bien constituir una startup no es el proceso más sencillo, ofrece beneficios importantes. Estas son las principales razones por las que constituir tu startup puede ser una decisión inteligente:
Responsabilidad limitada: Una de las principales ventajas de la constitución es la separación de los activos personales y comerciales. Si la empresa incurre en deudas o enfrenta problemas legales, los activos personales, como tu casa y tus ahorros, suelen estar protegidos. Esta consideración es de especial importancia para las startups porque alrededor del 80 % de las startups de EE. UU. no sobreviven más allá del primer año.
Acceso a capital: La constitución puede facilitar la recaudación de dinero para tu empresa. Es más probable que los inversores pongan dinero en una sociedad que en una persona. Del mismo modo, a las instituciones financieras les puede resultar menos riesgoso prestar dinero a una entidad constituida.
Transferencia de propiedad más fácil: A las empresas constituidas les resulta más fácil cambiar de propietario o agregar copropietarios, ya que la estructura empresarial permite la emisión de acciones, lo que ofrece una forma simplificada y flexible de transferir participaciones en la propiedad, recaudar capital mediante la venta de acciones a los inversores y recompensar a los empleados mediante una compensación basada en acciones.
Beneficios fiscales: La constitución puede permitir un tratamiento fiscal más favorable de los ingresos comerciales. Las empresas también pueden pasar una mayor cantidad de gastos como deducciones.
Credibilidad: El uso de "Inc." o "LLC" en el nombre de tu empresa, algo que solo las sociedades pueden hacer, puede brindarle un aire de legitimidad a tu negocio. Esto puede ayudarte a ganarte la confianza de clientes y socios potenciales.
Longevidad: Una sociedad anónima continúa existiendo incluso si el propietario se va o muere, lo que facilita que el negocio sobreviva.
Estructura formal: Una sociedad anónima tiene una estructura organizativa establecida, que a menudo incluye una junta directiva. Esto puede simplificar la toma de decisiones y la gobernanza.
Versatilidad de propiedad: Las sociedades anónima pueden tener múltiples clases de acciones, lo que permite diferentes tipos de propiedad con diferentes niveles de control.
Beneficios para empleados: A las empresas constituidas les resulta más fácil establecer fondos de jubilación, opciones sobre acciones y otros beneficios para los empleados. Estas medidas pueden atraer talento de mayor calidad.
Crecimiento estratégico: La constitución puede abrir las puertas a sociedades y empresas conjuntas que pueden estar fuera del alcance de las empresas unipersonales o las sociedades colectivas.
Desafíos de constituir tu startup
Aunque a la mayoría de las empresas les resulta relativamente sencillo constituir y consolidar su existencia como entidad jurídica, su constitución puede presentar desafíos. Al igual que con la mayoría de los obstáculos relacionados con los negocios, el mejor primer paso es saber qué esperar. Estos son algunos de los obstáculos más comunes:
Costos iniciales: Constituir una startup implica tarifas de presentación y, potencialmente, la búsqueda de asesoría legal, lo que puede ser una carga financiera para un nuevo negocio.
Documentación: La constitución implica obligaciones relacionadas con documentación y tareas tareas administrativas, incluida la presentación de los estatutos constitutivos iniciales y el manejo de informes de cumplimiento en curso.
Complejidad fiscal: A pesar de que la constitución tiene muchos beneficios fiscales, el proceso también presenta requisitos de declaración de impuestos más complicados. Esto a menudo requiere contratar a un contador, lo que se suma a los costos operativos.
Normativa: Las sociedades anónimas están sujetas a diferentes normativas locales, estatales y federales. El cumplimiento puede llevar mucho tiempo y, si se maneja mal, puede dar lugar a multas o problemas legales.
Dilución de la propiedad: La obtención de capital a menudo implica la emisión de acciones, lo que puede diluir la participación en la propiedad de los propietarios originales. Esto puede llevar a un menor control sobre el negocio a largo plazo.
Toma de decisiones: El proceso de toma de decisiones de una sociedad anónima puede volverse complicado y lento debido a su junta directiva y otras partes interesadas, en contraste con la agilidad de las empresas no constituidas.
Doble tributación: En ciertos tipos de sociedades anónima, las ganancias pueden gravarse a nivel corporativo y, nuevamente, cuando las ganancias se distribuyen a los accionistas. Esto puede dar lugar a una doble tributación.
Escrutinio público: Según el tipo de constitución, es posible que una empresa deba divulgar información financiera y otra información confidencial. Estas divulgaciones someten a la empresa a un mayor escrutinio público.
Carga del empleado: Proporcionar beneficios a los empleados, como planes de jubilación y opciones sobre acciones, puede ser una tarea compleja que requiere esfuerzos administrativos adicionales.
Estrategia de salida: Si decides vender el negocio o irte, la estructura formal y las obligaciones de una sociedad anónima pueden hacer que este proceso sea más complicado de lo que sería para una empresa unipersonal o una sociedad colectiva.
Cómo constituir tu startup
La constitución de una startup es un hito importante para cualquier empresa, ya que tiene un impacto sustancial en su forma de operar, recaudar fondos y crecer. Aquí tienes una guía rápida del proceso:
Tipos de estructuras societarias
Una de las primeras decisiones que tendrás que tomar es elegir el tipo de estructura societaria que mejor se adapte a las necesidades de tu startup. En Estados Unidos, las startups pueden elegir entre varios tipos de estructuras, que ofrecen diferentes ventajas y desventajas. A continuación se muestran los tipos más comunes:
Empresa unipersonal: Esta estructura empresarial es la más sencilla. Es un espectáculo unipersonal en el que la empresa y el propietario son la misma entidad a efectos fiscales y de responsabilidad. Es fácil de configurar, pero no ofrece protección de responsabilidad personal.
Sociedad colectiva: Involucra a dos o más personas que acuerdan compartir las ganancias y pérdidas de un negocio. Las diferentes formas de este acuerdo incluyen a las sociedades colectivas generales y las sociedades limitadas. Las sociedades colectivas generales dividen el control y las ganancias entre todos los miembros, mientras que las sociedades limitadas permiten que los miembros tengan una función más restringida, limitando su responsabilidad pero también su control sobre el negocio.
Sociedad de responsabilidad limitada (LLC): Esta estructura, al igual que una sociedad anónima, proporciona cierta protección contra la responsabilidad personal, pero permite una mayor flexibilidad con respecto a los impuestos. Es una opción popular por su adaptabilidad y sus requisitos de gobernanza más flexibles.
Sociedad anónima: Se trata de una estructura más compleja que implica la emisión de acciones, la creación de un consejo de administración y el cumplimiento de una serie de normativas. Dos de los principales tipos de sociedades anónimas son las corporaciones y las sociedades de tipo S.
- Corporación: Esta es la corporación estándar. Proporciona la mayor protección de responsabilidad, pero está sujeta a doble tributación.
- Sociedad de tipo S: Al igual que una corporación, una sociedad de tipo S permite que las ganancias y pérdidas se transfieran a los accionistas a efectos fiscales, evitando así la doble tributación.
- Corporación: Esta es la corporación estándar. Proporciona la mayor protección de responsabilidad, pero está sujeta a doble tributación.
Sociedad sin fines de lucro: Si tu negocio se centra en el trabajo social, educativo o caritativo, una estructura sin fines de lucro podría ser una opción viable. Te permite adquirir el estado de exención de impuestos, pero requiere que las ganancias se reinviertan en la misión de la organización en lugar de distribuirse a los accionistas.
Cada una de estas estructuras tiene su propio conjunto de requisitos legales, beneficios e inconvenientes. La elección correcta para tu startup depende de diferentes factores, como los objetivos de la startup, la cantidad de propietarios y la situación financiera.
Cómo constituir una startup paso a paso
La constitución involucra pasos que te ayudan a establecer tu startup como una entidad legal separada de tu persona. A continuación te ofrecemos una guía paso a paso para constituir tu startup.
Investiga y decide cuál es el mejor tipo de estructura empresarial: En función de las necesidades, los objetivos y las consideraciones financieras de tu empresa, decide qué estructura empresarial —por ejemplo, empresa unipersonal, sociedad colectiva, LLC, o corporación— funciona mejor para tu caso.
Elige el nombre de tu empresa: Asegúrate de que el nombre que elijas esté disponible en tu estado y no infrinja las reglas de nombres de otra empresa. También es posible que desees verificar la disponibilidad del dominio si planeas tener un sitio web.
Registra el nombre y la marca: Una vez que hayas elegido un nombre, debes registrarlo ante los organismos gubernamentales necesarios. También es posible que desees solicitar una marca comercial para proteger el nombre.
Designa un agente registrado: Tu agente registrado será responsable de recibir los documentos legales en nombre de tu sociedad.
Redacta y presenta los estatutos constitutivos: Estos son los documentos oficiales que establecen a tu negocio como una sociedad en tu estado. Deben presentarse ante la oficina del secretario de estado u otro organismo estatal apropiado.
Obtén un número de identificación del empleador (EIN): Un EIN es como un número de Seguro Social para las empresas. Necesitarás uno para presentar la declaración de impuestos y abrir una cuenta bancaria comercial.
Abre una cuenta bancaria comercial: Separa tus finanzas personales de tus operaciones comerciales abriendo una cuenta bancaria exclusivamente para transacciones comerciales.
Crea estatutos sociales: Son reglas internas que administran el funcionamiento de tu sociedad. Aunque no todas las sociedades están legalmente obligadas a tener estatutos, son muy recomendables para brindan claridad y consolidar la estructura.
Emite acciones y determina la propiedad: En el caso de las sociedades anónimas, deberás emitir acciones para indicar la propiedad. Mantén registros precisos de todo esto.
Realiza una reunión inicial de la junta directiva: En esta reunión, nombrarás a los funcionarios, aprobarás los estatutos (si corresponde) y establecerás el año fiscal, entre otras tareas.
Regístrate para los impuestos estatales y locales: Asegúrate de registrarte para todos los impuestos estatales y locales que se aplican a tu empresa, como el impuesto sobre las ventas y la retención fiscal a cuenta de los empleados.
Obtén los permisos y licencias necesarios: Investiga qué permisos y licencias federales, estatales y locales necesitas para operar, y obtenlos antes de hacer negocios.
Configura sistemas de contabilidad y registro: La contabilidad precisa es clave. Puedes contratar a un contador o usar un software para realizar un seguimiento de los ingresos, los costos y los impuestos.
Presenta informes e impuestos con regularidad: Según la estructura y la ubicación de tu empresa, es posible que debas presentar informes y declaraciones de impuestos trimestrales o anuales.
Mantén el cumplimiento corporativo: Para cumplir con las normativas legales, mantén registros precisos, realiza reuniones anuales y asegúrate de cumplir con todos los plazos de presentación y comisiones.
Mejores recomendadas para constituir una startup
Constituir una startup implica algo más que seguir protocolos legales. Ten en cuenta estas prácticas recomendadas para aprovechar el máximo valor y administrar la escalabilidad y el riesgo.
Calcula el tiempo correctamente: El tiempo puede tener un gran impacto en tus obligaciones y responsabilidades fiscales. Si es posible, constituye la sociedad al final de un año calendario para evitar complicaciones innecesarias.
Consulta a asesores experimentados: Incluso con la planificación más cuidadosa y la investigación más diligente, pueden surgir problemas. Trabajar con asesores legales y financieros que se especializan en startups puede ayudarte a evitar errores costosos.
Utiliza los calendarios de adquisición de derechos: Establezca un plan de opciones sobre acciones que utilice la adquisición de derechos para incentivar el compromiso a largo plazo de tu equipo.
Elige el estado correcto: Constituir la sociedad en un estado como Delaware puede proporcionar ventajas en cuanto a la familiaridad con los inversores, los precedentes legales y la flexibilidad. Estas ventajas pueden aplicarse incluso si tu empresa no opera allí. Más del 66 % de las empresas de la lista Fortune 500 están constituidas en Delaware, según la División de sociedades del estado. Sin embargo, esto puede implicar tarifas y documentación adicionales.
Gestiona los conflictos de forma preventiva: Redacta un acuerdo de fundadores que describa lo que sucederá en caso de desacuerdos o si uno de los fundadores se va. Esto puede minimizar el riesgo y evitar complicadas batallas legales más adelante.
Optimiza los beneficios fiscales: Las diferentes estructuras corporativas tienen diferentes implicaciones fiscales. Por ejemplo, las sociedades de tipo S permiten que los ingresos fluyan directamente a las declaraciones de impuestos individuales, lo que podría reducir las cargas fiscales. Sin embargo, vienen con restricciones en la cantidad de accionistas y tipos de acciones que se pueden emitir.
Lleva a cabo una debida diligencia integral: Antes de constituir la sociedad, investiga a fondo tu mercado, responsabilidades, derechos de propiedad intelectual y otros elementos que puedan afectar a tu negocio. Esto te brindará el conocimiento para elegir la mejor estructura y estrategias corporativas.
Documenta todo: Mantén registros detallados de todo, desde los contratos de los empleados hasta las actas de la junta directiva. Esto facilita la diligencia debida para los inversores potenciales y, a menudo, es un requisito legal.
Establece fuertes controles internos: Cuanto más estructurados y controlados estén tus procesos internos, más fácil te resultará gestionar el crecimiento y cumplir con los requisitos legales. Esto es especialmente cierto cuando se trata de prácticas financieras.
Ten en cuenta los plazos de cumplimiento: No cumplir con la fecha límite de presentación puede generar sanciones y, en casos extremos, la disolución de tu negocio. Utiliza recordatorios y considera la posibilidad de emplear un software de cumplimiento.
Asegura los derechos de propiedad intelectual desde el principio: Realiza las presentaciones para patentes, derechos de autor o marcas comerciales lo antes posible para proteger tus activos. Esto también puede hacer que tu negocio sea más atractivo para inversores potenciales.
Plan de protección de datos: Implementa medidas integrales de seguridad de datos desde el primer día. Esto te protege a ti y a tus clientes y puede ser un punto de venta para posibles inversores.
Investiga a fondo a los posibles inversores: Comprender los antecedentes y las intenciones de tus inversores puede prevenir conflictos y hacer que tu negocio avance hacia objetivos compartidos, especialmente si estás ofreciendo acciones a cambio de fondos.
Crea un consejo asesor: Este consejo está formado por veteranos del sector que pueden brindar asesoramiento experto sin comprometerse con la participación diaria de un director. También pueden ser factores influyentes a la hora de establecer contactos y abrir puertas para tu startup.
Ten en cuenta una estrategia de salida: Incluso en esta etapa inicial, piensa en cómo puedes eventualmente vender el negocio, salir a la bolsa o realizar la transición de propiedad. Esta previsión puede ayudarte a tomar decisiones acertadas desde el principio.
Seguir estas prácticas recomendadas con respecto a la constitución de la sociedad te ayudará a crear una empresa que sea legalmente sólida y esté bien posicionada ante los desafíos y las oportunidades.
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Cómo crear la empresa en Delaware
Atlas revisará tu solicitud y presentará tus documentos de constitución en Delaware en el plazo de un día hábil. Todas las solicitudes de Atlas incluyen un servicio de procesamiento acelerado de 24 horas en el estado, sin cargo adicional. Atlas cobra $500 por la creación y tu primer año de servicios de agente registrado (un requisito de cumplimiento del estado), y $100 cada año a partir de entonces para mantener tu agente registrado.
Cómo obtener tu identificación fiscal (EIN) del IRS
Una vez finalizada la constitución en Delaware, Atlas solicitará la identificación fiscal del IRS de tu empresa. Los fundadores que proporcionen un número de seguridad social de EE. UU., una dirección de EE. UU. y un teléfono de EE. UU. son elegibles para el procesamiento acelerado; todos los demás usuarios recibirán el procesamiento estándar. En el caso de los pedidos estándar, Atlas llama al IRS para obtener el EIN por ti, utilizando datos del IRS en tiempo real para determinar cuándo es probable que tu presentación esté disponible. Puedes leer más sobre cómo Atlas recupera tu EIN y ver las ETA de identificación fiscal actuales.
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El contenido de este artículo tiene solo fines informativos y educativos generales y no debe interpretarse como asesoramiento legal o fiscal. Stripe no garantiza la exactitud, la integridad, adecuación o vigencia de la información incluida en el artículo. Si necesitas asistencia para tu situación particular, te recomendamos consultar a un abogado o un contador competente con licencia para ejercer en tu jurisdicción.