Por lo general, las empresas sujetas al impuesto sobre el valor añadido (IVA) deben indicarlo en las facturas de los bienes y servicios vendidos. Sin embargo, es importante echar un vistazo más de cerca a los clientes en el extranjero. Se aplican las normas fiscales individuales, especialmente para las entregas y otras transacciones en terceros países. En este artículo, descubrirás qué es un tercer país y qué normativa en materia de IVA se aplica a los servicios y entregas en ese país. También explicamos la diferencia entre gestionar el IVA en Alemania y dentro del territorio comunitario.

¿De qué trata este artículo?

• ¿Qué es un tercer país?
  
• ¿Qué normativa en materia de IVA se aplica a nivel nacional y en el territorio comunitario?
  
• ¿Qué normativa en materia de IVA se aplica en los terceros países?
  
• ¿Qué debes saber a la hora de importar y exportar mercancías a terceros países?
  
• ¿Qué necesitas saber para los servicios en terceros países?
  

¿Qué es un tercer país?

Cuando las empresas alemanas venden bienes y servicios, deben diferenciar entre tres áreas objetivo del IVA: Alemania, otros países europeos y países no europeos.

De conformidad con el artículo 1, apartado 2 de la Ley del IVA alemana (UStG), la República Federal de Alemania es un territorio nacional. Quedan excluidas y sujetas a reglamentaciones especiales la zona de Büsingen, la isla de Heligoland y las zonas francas definidas en el sentido del artículo 243 del código aduanero de la Unión.

La sección 1, párrafo 2a de la UStG describe el territorio de la comunidad como separado de ella. Esto incluye los territorios de los demás estados miembros de la Unión Europea, además de Alemania. Los Estados miembros de la UE son:

• Austria
  
• Bélgica
  
• Bulgaria
  
• Croacia
  
• Chipre, incluidas las bases militares británicas de Akrotiri y Dhekelia
  
• República Checa
  
• Dinamarca
  
• Estonia
  
• Finlandia
  
• Francia
  
• Alemania
  
• Grecia
  
• Hungría
  
• Irlanda
  
• Italia
  
• Letonia
  
• Lituania
  
• Luxemburgo
  
• Malta
  
• Países Bajos
  
• Polonia
  
• Portugal, incluidas las Azores y Madeira
  
• Rumania
  
• Eslovaquia
  
• Eslovenia
  
• España, incluidas las Islas Baleares
  
• Suecia
  

El territorio de la comunidad también incluye el Principado de Mónaco y los países de Islandia, Liechtenstein y Noruega. Estos últimos no son miembros de la UE, sino que forman parte del Espacio Económico Europeo (EEE).

Los terceros países son todos los Estados que no pertenecen al territorio de la Comunidad, es decir, la UE o el EEE (artículo 1, apartado 2, letra a), de la UStG). Entre ellos se encuentran Brasil, China, Japón, Rusia y Estados Unidos. Aun así, también pueden estar ubicados en territorio de la UE pero no pertenecer al área de la comunidad, como Andorra, San Marino o Ciudad del Vaticano.

Debido a su salida de la UE, el UStG ha identificado en general a Gran Bretaña e Irlanda del Norte como terceros países desde 2021. Sin embargo, Irlanda del Norte tiene un estatuto especial: para el comercio de servicios, se considera un tercer país, pero para el comercio de bienes, forma parte del territorio comunitario.

¿Qué normativa sobre el IVA se aplica a nivel nacional y en el territorio comunitario?

En Alemania se aplican tres tipos de IVA: el tipo impositivo normal aplicable a la mayoría de las entregas y servicios es del 19 %, determinados bienes de uso cotidiano están sujetos a un tipo impositivo reducido del 7 % véase el artículo 12 de la UStG) y unos pocos servicios están completamente exentos de IVA, con un tipo de IVA del 0 % véase el artículo 4 de la UStG).

En general, la obligación de pagar el IVA se aplica a todas las empresas alemanas que cobran dinero por sus entregas y servicios. Esto incluye también a los profesionales autónomos si ejercen de forma independiente una actividad comercial o profesional a cambio de una remuneración. No obstante, quienes voluntariamente reivindiquen el estado de emprendedor a pequeña escala por debajo de los límites de ventas legalmente definidos están exentos del IVA (véase el apartado 19 de la UStG).

Otras normas sobre el IVA se aplican si una empresa alemana vende bienes o servicios a través de las fronteras nacionales dentro del territorio comunitario. En el caso de las entregas transfronterizas de bienes y productos entre entidades europeas, se aplica la denominada entrega intracomunitaria. Bajo ciertas condiciones, están exentos de IVA.

Cuando las empresas alemanas realizan transacciones a clientes de otro país de la UE, se denomina servicio intracomunitario. Dado que la actividad no tiene lugar en Alemania, no se grava allí, sino en el lugar donde se encuentra el destinatario. En estos casos, se aplica el denominado procedimiento de inversión del sujeto pasivo.

¿Qué es el procedimiento de inversión del sujeto pasivo?

En este procedimiento, el destinatario de la transacción recauda el IVA, no el prestador. La normativa artículo 196 de la Directiva del IVA de la UE puede invertir la responsabilidad contributiva en las entregas transfronterizas de bienes y servicios. En este caso, las empresas alemanas solo tienen importes netos en sus facturas. También deben incluir en las facturas y por escrito las palabras «responsabilidad contributiva del destinatario del servicio». El procedimiento de inversión del sujeto pasivo se aplica en todos los Estados miembros de la UE bajo ciertas condiciones. La base legal es la Directiva sobre el IVA, vinculante para todos los países de la UE Directiva 2006/112/EC) y en la legislación alemana sobre ventas Artículo 13b de la UStG.

¿Qué normativa sobre el IVA se aplica en terceros países?

A diferencia del impuesto nacional y del territorio comunitario, el IVA en terceros países está sujeto a regulaciones individuales. No existen regulaciones generales transfronterizas. Muchos países, como Austria, Canadá, China, Estados Unidos, Gran Bretaña, Singapur y Suiza, utilizan el procedimiento de inversión del sujeto pasivo para recaudar el IVA. Además, Alemania tiene acuerdos fiscales comparables con algunos países. Aunque, en algunos casos, las empresas alemanas también deben registrarse a efectos del IVA en el país en cuestión o designar a un «representante fiscal» que las represente en cuestiones fiscales.

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IVA en el país, en el territorio de la Comunidad y en terceros países

¿Qué debes saber cuando importas y exportas los productos a terceros países?

De acuerdo con el apartado 4, n.º 1a y el apartado 6 de la UStG, las entregas de empresas alemanas a entidades de terceros países son entregas de exportación libres de impuestos. Las empresas alemanas no tienen que mostrar el IVA en sus facturas: el requisito previo es que los productos lleguen físicamente al tercer país. Una empresa puede demostrarlo, por ejemplo, mediante documentos de exportación o confirmaciones escritas de la aduana. La empresa alemana debe presentar una prueba de exportación para beneficiarse de la exención fiscal. Tan pronto como las mercancías llegan al tercer país, están sujetas a las regulaciones aduaneras y del IVA de importación del país respectivo. Por lo general, la entidad receptora los paga.

Si las empresas de terceros países importan mercancías a Alemania, la aduana debe despacharlas, sometiéndolas al IVA de importación. La empresa importadora suele cobrar el IVA de importación. Se aplica el tipo impositivo estándar del 19 % o, para determinados bienes, el tipo impositivo reducido del 7 %. Si la empresa receptora utiliza los bienes para su negocio, puede reclamarlos como impuesto soportado como parte de su declaración de IVA.

¿Qué necesitas saber cuando proporcionas servicios en terceros países?

Si una empresa alemana ofrece servicios a un cliente en un tercer país, esto generalmente está sujeto a impuestos en el país del destinatario. Como se indica en el apartado 2 del artículo 3a de la UStG, el lugar de la prestación es la sede del cliente receptor o la ubicación del establecimiento permanente si la actividad tiene lugar en él. Sin embargo, esta normativa solo se aplica a las transacciones B2B. Para los servicios que se dan a particulares en terceros países, la oficina fiscal suele cobrar el IVA en Alemania (véase el apartado 1 del artículo 3a de la UStG). Por lo tanto, los beneficiarios de la prestación deben demostrar su condición empresarial, por ejemplo, utilizando un certificado de su autoridad fiscal responsable. Las excepciones son los denominados servicios por catálogo, según el apartado 4 del artículo 3a de la UStG: en estos casos, no es necesaria la prueba, ya que, en general, son imponibles en el tercer país, independientemente de la condición del beneficiario de la prestación.

Dicho esto, se aplican reglas especiales para determinar el lugar de la prestación de algunos servicios. Por ejemplo, las actividades inmobiliarias están sujetas a impuestos en el lugar donde se encuentra la propiedad. El requisito previo es que la propiedad sea una parte central. En el caso de alquileres a corto plazo de medios de transporte, el lugar de la prestación es donde los medios de transporte están disponibles. Los servicios de restaurante y catering también están sujetos a impuestos cuando se prestan. Las excepciones solo se aplican si esto sucede a bordo de un barco, tren o avión.

Si una entidad extranjera con sede en un tercer país presta servicios a una empresa alemana, se aplica el procedimiento de inversión del sujeto pasivo. Esto significa que la empresa alemana, como beneficiaria, se convierte en deudora del impuesto y debe pagar el IVA.