El impuesto sobre las actividades económicas es un costo inevitable para muchas empresas en Alemania, pero debido a que se calcula sobre una base variable, el importe que debe una empresa puede variar según su ubicación y su estructura. Por eso es importante que los propietarios de empresas entiendan cómo se calcula el impuesto sobre las actividades económicas, los riesgos que implica y cómo pueden adaptar sus estrategias empresariales en consecuencia.

En este artículo, analizaremos qué es el impuesto sobre las actividades económicas, qué lo diferencia de otros tipos de impuesto y cómo calcularlo. También explicaremos los desafíos prácticos que conlleva el impuesto sobre las actividades económicas, incluido el comercio electrónico y las empresas de software como servicio (SaaS), así como los riesgos de infringir las leyes fiscales comerciales.

¿Qué contiene este artículo?

• Impuesto sobre las actividades económicas: qué es y qué tiene de especial
  
• Cálculo del impuesto sobre las actividades económicas
  
• Carga fiscal doble: impuesto sobre las actividades económicas más impuesto sobre sociedades
  
• Los desafíos prácticos del impuesto sobre las actividades económicas
  
• Los riesgos de infringir las leyes fiscales comerciales
  

Impuesto sobre las actividades económicas: qué es y qué tiene de especial

El impuesto sobre las actividades económicas es un impuesto sobre bienes o activos que gravan los municipios locales. Toda empresa que realice actividades comerciales en Alemania debe pagar el impuesto sobre las actividades económicas, incluidas las sociedades, como las sociedades de responsabilidad limitada (GmbH) y las sociedades anónimas (AG), así como a las sociedades de personas, incluidas las sociedades colectivas (OHG) y las sociedades comanditarias (KG). Los trabajadores autónomos están exentos del impuesto sobre las actividades económicas, al igual que las empresas agrícolas y forestales (véanse los artículos 2 y 3 de la Ley del Impuesto sobre Actividades Comerciales de Alemania, GewStG).

El impuesto sobre las actividades económicas se calcula en función de lo que se conoce como «ingresos comerciales» de una empresa. Los ingresos comerciales son las ganancias de las operaciones de la empresa determinadas de conformidad con las regulaciones de la Ley alemana del impuesto a las ganancias (EStG) y la Ley alemana del gravamen corporativo (KStG). Los ingresos comerciales se calculan para el período fiscal comercial respectivo y luego se ajustan para tener en cuenta adiciones y deducciones específicas.

Estos ingresos comerciales se multiplican por la tasa federal básica normalizada y también por la tasa impositiva comercial del municipio correspondiente. Esto es lo que distingue al impuesto comercial de otros tipos de impuestos: cada municipio establece su propia tasa impositiva. Las tasas municipales están determinadas en gran medida por factores locales y, por lo tanto, varían considerablemente de una región a otra. Así, mientras que gravámenes como el impuesto sobre sociedades están estandarizados a nivel federal, el impuesto sobre las actividades económicas puede fluctuar enormemente. El impuesto sobre las actividades económicas es una fuente de ingresos fundamental para los Gobiernos municipales y se utiliza para financiar el gasto público.

¿Cuándo tengo que empezar a pagar el impuesto sobre las actividades económicas?

El impuesto sobre las actividades económicas se devenga en cuanto una empresa obtiene ingresos de sus operaciones comerciales y se establece una denominada «empresa permanente», según se define en el artículo 2 de la GewStG. Lo que importa aquí es el momento en que comienzan efectivamente las actividades comerciales, no cuándo se realiza la inscripción comercial. Esto es lo que genera la obligación tributaria por impuesto comercial, a menos que la empresa pueda acogerse a alguna de las exenciones legales previstas en el artículo 3 de la GewStG.

Cálculo del impuesto sobre las actividades económicas

Como propietario de un negocio, no estás obligado a calcular tu propio impuesto sobre las actividades económicas: de ello se encarga la Oficina Tributaria alemana. Sin embargo, sigue siendo importante entender cómo se compone tu obligación fiscal. El proceso incluye varios pasos, que resumimos a continuación.

Cálculo de ingresos comerciales

Los ingresos comerciales son la base para calcular el impuesto sobre las actividades económicas. Esta cifra se determina a partir de las utilidades gravables del negocio, menos ciertos conceptos establecidos en la GewStG. Por ejemplo, se realizan sumas por gastos de arrendamiento o compensación de pasivos, de conformidad con el artículo 8 de la GewStG. También se aplican deducciones por determinados beneficios fiscales, pérdidas fiscales pendientes de compensación y otros conceptos, según lo indicado en el artículo 9 de la GewStG. El monto restante después de estas sumas y deducciones es el que se utiliza para calcular el impuesto sobre las actividades económicas adeudado.

Consideración del monto exento del impuesto sobre las actividades económicas

La deducción del impuesto sobre las actividades económicas es un factor importante al calcular dicho impuesto. Las personas físicas y las sociedades colectivas se benefician de una deducción de 24,500 euros conforme al artículo 11 de la GewStG. Si los ingresos comerciales anuales, antes del redondeo al múltiplo de 100 euros más cercano, está por debajo de este monto, no se adeuda impuesto sobre las actividades económicas. Si los ingresos comerciales superan la deducción, solo el importe que exceda dicho límite está sujeto al impuesto sobre las actividades económicas. Esta regla no se aplica a las sociedades mercantiles, que deben pagar el impuesto comercial sobre la totalidad de sus ingresos comerciales.

Cálculo de la base del impuesto sobre las actividades económicas

La base imponible del impuesto comercial se calcula utilizando la tasa federal básica del 3.5 %, que se aplica de manera uniforme a todas las empresas en Alemania. Esta base imponible constituye el valor básico, que posteriormente se multiplica por la tasa impositiva establecida por el municipio correspondiente. Esto significa que, si tienes ingresos comerciales de 100,000 euros, tu base del impuesto comercial sería de 3500 euros.

Cómo se aplica la tasa del impuesto sobre las actividades económicas

La tasa impositiva es el factor decisivo en el impuesto comercial y desempeña un papel fundamental en el monto final del impuesto. Cada municipio en Alemania establece su propia tasa, que luego se multiplica por la base del impuesto sobre las actividades económicas de la empresa. Esta tasa puede variar enormemente de un municipio a otro. Mientras que Berlín aplica actualmente una tasa del 410 % y Múnich una del 490 %, algunos municipios situados muy cerca de grandes ciudades aplican tasas significativamente más bajas. Por ejemplo, Monheim tiene una tasa del 250 % y Unterhaching una del 295 %.

Ejemplo de cálculo

A continuación, veremos un ejemplo de cómo se calcula el impuesto sobre las actividades económicas.

Supongamos que una sociedad colectiva obtiene ingresos comerciales de 120,000 euros después de las sumas y deducciones. De este monto se resta la deducción de 24,500 euros correspondiente al impuesto sobre las actividades económicas.

El cálculo sería:

€120,000 + €24,500 = €95,500

Solo el monto que excede la deducción está sujeto al impuesto sobre las actividades económicas; en este caso, 95,500 euros. Luego se aplica la tasa federal básica del 3.5 % al ingreso comercial restante para determinar la base del impuesto comercial. Es decir:

€95,500 x 3.5 % = €3,342.50

Por último, esta base imponible se multiplica por la tasa impositiva municipal. Supongamos que la sociedad colectiva tiene su domicilio en Múnich, que aplica una tasa del 490 %.

€3,342,50 x 490 % = €16,378.25

En este ejemplo, por lo tanto, la sociedad colectiva adeuda 16,378.25 euros en concepto de impuesto sobre la actividad comercial.

Carga fiscal doble: impuesto sobre las actividades económicas más impuesto sobre sociedades

La carga fiscal de las empresas alemanas es de aproximadamente el 30 %, significativamente más alta que el promedio de alrededor del 23 % de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OECD). Esto afecta principalmente a las sociedades mercantiles, ya que deben pagar un 15 % de impuesto sobre sociedades además del impuesto sobre las actividades económicas. Los profesionales independientes o las sociedades colectivas, en cambio, están exentos del pago del impuesto sobre sociedades.

Muchas asociaciones industriales, así como partidos liberales y grupos de presión, consideran que esta doble tributación limita la capacidad de las empresas alemanas para competir a nivel internacional. Por ello, la Cámara de Comercio e Industria de Alemania, por ejemplo, está pidiendo una reducción gradual de la tasa del impuesto sobre sociedades al 10%, además de un sistema para compensar el impuesto comercial con el impuesto sobre sociedades. La Unión de Medianas Empresas y Economistas (MIT) está abogando por la reforma de las finanzas municipales y la modernización del régimen del impuesto comercial, afirmando en julio de 2024: «En su forma actual, el impuesto comercial alemán es una anomalía a nivel internacional y supone una carga significativa para las empresas».

Las obligaciones fiscales a las que están sujetas las empresas en Alemania son diversas y complejas. Mientras que el impuesto sobre las actividades económicas y el impuesto sobre sociedades son evaluados por las autoridades fiscales, las empresas son responsables de facturar correctamente y cumplir con otros tipos de impuestos, como el impuesto al valor agregado (IVA) o el impuesto sobre las ventas. Stripe Tax puede ayudarte a cumplir estos requisitos de forma eficiente al automatizar el cálculo y la recaudación del IVA y del impuesto sobre las ventas para productos físicos y digitales, facilitando así el seguimiento de tus obligaciones fiscales para que puedas concentrarte en hacer crecer tu negocio.

Los desafíos prácticos del impuesto sobre las actividades económicas

El impuesto sobre las actividades económicas conlleva una serie de desafíos prácticos para las empresas, especialmente en lo que respecta a la rentabilidad. Además, afecta de manera distinta a las compañías según sus modelos de negocio. En algunos casos, puede ser necesario ajustar la estrategia empresarial.

Impacto en la rentabilidad

Cualquier persona que realice actividades comerciales en Alemania probablemente estará obligada a pagar el impuesto sobre las actividades económicas, incluidas las empresas de SaaS y de comercio electrónico. Dado que la carga fiscal de una empresa puede tener un impacto significativo en su flujo de caja y su rentabilidad, las empresas en línea también deben tener en cuenta el impuesto comercial al realizar sus cálculos.

Una de las principales ventajas para muchas empresas de comercio electrónico y SaaS es que suelen tener mayor flexibilidad para elegir sus ubicaciones en comparación con los modelos de negocio tradicionales. Mientras que los negocios físicos consideran principalmente la afluencia de público, la logística y la infraestructura al elegir sus ubicaciones, los proveedores de comercio electrónico y SaaS están mucho menos limitados al seleccionar sitios para sus instalaciones o sede. Esta flexibilidad les permite optar por ubicaciones con tasas impositivas municipales particularmente favorables.

Una empresa cuya sede se encuentra en un municipio con una tasa impositiva relativamente baja puede beneficiarse de reducciones fiscales significativas en comparación con una empresa similar ubicada en otra localidad. Por ello, las empresas en línea deben considerar específicamente el impuesto comercial en su estrategia de ubicación, con el fin de optimizar su carga fiscal total y asegurar su rentabilidad a largo plazo.

El impacto que tiene tu modelo de negocio

Para las empresas puramente de servicios, como firmas de consultoría o proveedores de software, la base imponible del impuesto comercial suele ser las utilidades obtenidas por la prestación de servicios. Dado que estas empresas normalmente no venden productos físicos —es decir, no cuentan con almacenes ni espacios de venta—, no tienen sumas por gastos de arrendamiento u otros costos de infraestructura. Esto significa que su carga fiscal se concentra casi por completo en las utilidades que generan.

Los comerciantes minoristas que venden productos físicos suelen contar con una infraestructura más extensa y, por lo tanto, con una carga fiscal más elevada. Esto se debe a las sumas que deben aplicarse por los costos de arrendamiento de locales de venta y espacios de almacenamiento. En materia de precios, estas empresas deben prestar especial atención a que sus estructuras de costos contemplen también el impuesto sobre las actividades económicas, ya que esta carga adicional puede afectar negativamente su rentabilidad.

Las empresas que funcionan como marketplaces deben ser igual de meticulosas al calcular sus cargas fiscales. Esto es especialmente cierto en el caso del impuesto sobre las actividades económicas, donde un problema frecuente es cómo considerar los ingresos por el uso de la plataforma y los gastos asociados. Este tipo de modelos de negocio puede hacer que el cálculo del impuesto comercial sea más complejo, ya que intervienen múltiples partes y una variedad de fuentes de ingresos que afectan los ingresos comerciales.

Adaptación de la estrategia de tu empresa

Las empresas con una carga elevada de impuesto sobre las actividades económicas deben adaptar sus estrategias empresariales en consecuencia. Esto incluye elegir una ubicación adecuada para el negocio y optimizar los precios, con el fin de compensar la carga fiscal adicional.

También puede ser una buena idea revisar la estructura de la empresa para aprovechar deducciones o montos exentos. En algunos casos, puede resultar conveniente utilizar estructuras de tenencia (holdings) o trasladar determinadas unidades de negocio a ubicaciones con tasas de impuesto comercial más bajas. Buscar asesoría fiscal en una etapa temprana puede ayudar a las empresas a identificar las mejores opciones y garantizar que sigan siendo competitivas a largo plazo.

Los riesgos de infringir las leyes fiscales comerciales

Como regla general, la oficina fiscal con jurisdicción sobre la sede de la empresa determina cuánto impuesto comercial se adeuda, y las empresas realizan pagos anticipados de manera trimestral. Sin embargo, sigue siendo responsabilidad de la compañía garantizar que la información que proporciona a la oficina fiscal para esta determinación sea correcta. Proporcionar información falsa sobre los ingresos comerciales —por ejemplo, al omitir las sumas o deducciones requeridas— puede derivar en atrasos fiscales significativos, que con frecuencia vienen acompañados de recargos e intereses elevados, lo que podría generar una carga adicional sobre la liquidez de la empresa.

Otra forma en que una empresa puede infringir la normativa del impuesto sobre las actividades económicas es no presentar su declaración fiscal a tiempo o no presentarla en absoluto. En estos casos, las compañías no solo se exponen a la carga financiera derivada de los atrasos fiscales, sino también a implicaciones legales, como multas administrativas o investigaciones penales por posible evasión fiscal. Incluso errores menores en una declaración permiten que la oficina fiscal lleve a cabo una auditoría exhaustiva, lo que implica costos adicionales de tiempo y dinero para la empresa. Las declaraciones fiscales deben presentarse electrónicamente a través de ELSTER antes del 31 de julio del año siguiente. Este plazo se extiende hasta el 30 de abril del año posterior si la empresa contrata los servicios de un asesor fiscal.

Como propietario de un negocio, asegúrate de cumplir tus obligaciones relacionadas con el impuesto sobre las actividades económicas de manera regular y correcta. Llevar registros financieros precisos, documentar adecuadamente todos los datos pertinentes y buscar asesoría fiscal desde una etapa temprana son aspectos clave para calcular correctamente tu obligación tributaria y evitar riesgos y sanciones.