Los proveedores de software independientes (ISV) son empresas que crean, desarrollan y venden software que funciona en plataformas de terceros. Estos proveedores no fabrican el hardware en el que se ejecuta su software y no son propiedad de las empresas que sí lo hacen, por lo que se les conoce como independientes. Sus productos pueden abarcar desde aplicaciones especializadas para sectores concretos (por ejemplo, atención médica, finanzas) hasta herramientas generales de productividad, como software de oficina y programas de diseño gráfico.
Los ISV se centran en el funcionamiento y la facilidad de uso al desarrollar software para sus clientes. Al integrar las funcionalidades de pago, los ISV pueden mejorar estos dos aspectos y abordar hasta 35 billones de dólares en pagos al año. A continuación, explicaremos qué son los pagos integrados de ISV, cómo funcionan y sus ventajas y desafíos para los proveedores de software.
¿De qué trata este artículo?
- ¿Qué son los pagos integrados?
- ¿Cómo utilizan los ISV los pagos integrados?
- Ventajas de los pagos integrados de ISV
- Desafíos de la integración de pagos para los ISV y cómo resolverlos
- Mejores prácticas para los ISV en relación con la integración de pagos
¿Qué son los pagos integrados?
Los pagos integrados son funcionalidades de procesamiento de pagos incorporadas directamente en el software empresarial. Esta integración permite a las empresas gestionar los pagos dentro del mismo sistema que otras tareas operativas como la contabilidad, la gestión de inventario y la gestión de las relaciones con los clientes.
¿Cómo usan los ISV los pagos integrados?
Los ISV (siglas en inglés de «proveedores de software independiente») utilizan pagos integrados para mejorar su software y hacerlo más fácil de usar, especialmente en sectores donde las operaciones pueden ser complejas, como el comercio minorista, la atención médica y la hostelería. Así es como los ISV incorporan los pagos integrados:
Flujos de trabajo más sencillos: Los ISV integran el procesamiento de pagos para crear mejores flujos de trabajo de software. Por ejemplo, un sistema de punto de venta minorista con pagos integrados permite al personal de caja gestionar las ventas y aceptar pagos sin tener que cambiar de sistema. Esto agiliza las transacciones e integra los datos de ventas con los perfiles de los clientes, lo que permite a las empresas ofrecer un servicio y promociones personalizadas.
Gestión automatizada de datos: Cuando las empresas integran pagos, los datos de las transacciones se sincronizan automáticamente con los sistemas de análisis empresarial, contabilidad e inventario. Después de una venta exitosa, el sistema registra los ingresos en los informes financieros y ajusta los niveles de inventario en tiempo real para una mejor gestión de las existencias y menos discrepancias entre el inventario físico y el registrado.
Soluciones personalizadas: Los ISV desarrollan integraciones de pago que se adaptan específicamente a los flujos de trabajo y a las necesidades de cumplimiento normativo de los distintos sectores. En el sector de la salud, por ejemplo, diseñan sistemas de pago para gestionar facturas complejas que incluyen reclamaciones de seguros privados y gubernamentales. En el sector de la hostelería, los pagos integrados pueden vincular los cargos a las cuentas de las habitaciones, gestionar las reservas e incluso facilitar los registros de entrada y salida directamente a través del software.
Cumplimiento normativo y seguridad: Las soluciones de pago integradas incluyen protocolos de seguridad incorporados que ayudan a cumplir con la normativa y son capaces de proteger la información confidencial del cliente. Funciones como el cifrado de extremo a extremo, la tokenización y los sistemas de detección de fraude refuerzan la seguridad sin comprometer la experiencia del usuario.
Mejor experiencia del cliente: Al incorporar una variedad de métodos de pago en sus plataformas, los ISV garantizan que los usuarios finales puedan elegir su forma preferida de pago (por ejemplo, monedero digital, código QR). Esta flexibilidad puede mejorar la satisfacción y la retención del cliente.
Gestión de facturación recurrente: Los pagos integrados ayudan a gestionar la facturación recurrente automatizando el proceso de renovación, aplicando descuentos o promociones y gestionando los prorrateos o cambios en los planes de suscripción sin intervención manual. Esto reduce la carga administrativa de la gestión de suscripciones y ayuda a las empresas a mantener un flujo de ingresos constante.
Servicios adicionales: Más allá de la gestión de transacciones, los pagos integrados pueden enriquecer el software con funciones como pagos fraccionados, seguimiento de recompensas por fidelidad y análisis empresarial integral. Estos servicios pueden ayudar a las empresas a captar y retener clientes.
Flexibilidad: Por lo general, el software con funcionalidades de pago integradas puede gestionar cargas mayores sin necesidad de realizar revisiones importantes del sistema. Las soluciones basadas en la nube permiten a los ISV impulsar actualizaciones y nuevas funciones a nivel mundial para que los usuarios puedan beneficiarse de los últimos avances en tecnología de pago sin tiempo de inactividad ni interrupciones.
Ventajas de los pagos integrados de ISV
A continuación se muestran algunas de las ventajas de integrar los pagos directamente en el software:
Flujos de trabajo más sencillos: Los pagos integrados se consolidan en tareas de un único flujo de trabajo sencillo que normalmente requerirían varias plataformas. Esto significa que los usuarios pueden gestionar las transacciones en la misma plataforma en la que gestionan todo lo demás, ya sea la programación, la facturación o la gestión de clientes.
Soluciones de software más duraderas: La integración de los procesos de pago directamente en el software hace que este sea más valioso para los clientes. Los usuarios pueden volverse más dependientes de la eficiencia y comodidad que proporciona y ser menos propensos a cambiar a otro proveedor. Esta dependencia integrada mejora la retención de clientes para el ISV y fortalece la propuesta de valor del producto.
Diversificación de las fuentes de ingresos: La integración de las funcionalidades de pago abre nuevas fuentes de ingresos para los ISV más allá de las comisiones de licencia tradicionales. Los ISV pueden cobrar comisiones de transacción o incorporar características premium relacionadas con los pagos, como opciones de mayor seguridad y herramientas de informes personalizadas. Así se aumentan los ingresos generales y se incentiva la mejora continua de las funciones de pago de los ISV.
Cohesión operativa: Los pagos integrados eliminan la necesidad de conciliar los datos entre los sistemas. De este modo, se producen menos errores y discrepancias y los informes y dato financieros son más precisos.
Seguridad y cumplimiento de la normativa: Al controlar la integración de pagos, los ISV pueden controlar la seguridad de los pagos y el cumplimiento de la normativa, y personalizar estas funciones según las necesidades específicas de sus mercados y entornos normativos. Así se protege la información de pago confidencial de los usuarios finales y se genera confianza en los clientes.
Ventaja competitiva: En un mercado saturado, una solución de pago integrada puede distinguir las ofertas de un ISV de las de la competencia. Esta característica puede resultar especialmente atractiva en sectores como el e-commerce y la sanidad, donde la facilidad y la seguridad de las transacciones financieras son prioridades absolutas.
Soluciones flexibles: Los pagos integrados pueden expandirse para dar cabida a mayores volúmenes y transacciones más complicadas sin que las empresas tengan que cambiar de sistema ni gestionar actualizaciones costosas. Esta flexibilidad hace que el software de los ISV sea una solución a largo plazo para los usuarios y aumenta el valor vitalicio del cliente.
Análisis de datos: Los pagos integrados cuentan con potentes herramientas de análisis que permiten rastrear y analizar cada transacción y proporcionar a las empresas información sobre las tendencias de ventas, las preferencias de los clientes y el estado financiero. Estos datos ayudan a la toma de decisiones estratégicas y pueden ser un diferenciador clave para el software en cualquier sector.
Menor gestión de las relaciones: Las soluciones integradas reducen la complicación logística de gestionar diferentes contactos, contratos y líneas de soporte técnico a través de varios proveedores de software y procesadores de pagos. Esto puede ser un coste oculto sustancial en la gestión de las operaciones comerciales.
Desafíos de la integración de pagos para los ISV y cómo resolverlos
La integración de los pagos en el software del ISV implica desafíos técnicos, normativos y de experiencia del usuario. A continuación se incluye una descripción general de las dificultades más frecuentes y algunos consejos sobre cómo superarlas:
Integración: La integración de pasarelas o procesadores de pagos generalmente implica la gestión de sistemas complejos, protocolos de transacciones y sincronización de datos. Un desajuste entre tu pila tecnológica y la solución de pago puede crear problemas a largo plazo. Al evaluar a los proveedores potenciales, busca interfaces de programación de aplicaciones (API) limpias, documentación completa, kits de desarrollo de software (SDK) en tus idiomas preferidos y un historial de integraciones de ISV sencillas para minimizar estos problemas.
Seguridad: Un fallo de seguridad o el incumplimiento de normas como los Estándares de Seguridad de Datos del Sector de Tarjetas de Pago (PCI DSS) pueden causar grandes daños financieros y de reputación. Elige un socio de pagos de PCI de nivel 1 que ofrezca funciones de seguridad avanzadas, como tokenización, cifrado y detección de fraudes. Realiza auditorías periódicas para adelantarte a las nuevas amenazas.
Costes: El procesamiento de pagos conlleva comisiones por transacción, costes de pasarela y posibles contracargos. Los ISV deben ofrecer precios competitivos a los clientes y, al mismo tiempo, mantener un margen de beneficio aceptable. Para mantener los costes bajo control y maximizar los ingresos, negocia comisiones en función de las proyecciones de volumen y los tipos de transacciones, implementa medidas inteligentes de prevención del fraude para minimizar los contracargos y explora servicios de valor añadido, como la facturación recurrente para obtener más fuentes de ingresos.
Experiencia del usuario: Un flujo de compra torpe o confuso puede hacer fracasar rápidamente una venta, especialmente cuando las empresas más pequeñas compiten con las experiencias de pago simplificadas de los gigantes del sector. Para solucionar este problema, presta especial atención al diseño de la interfaz de usuario e incluye funciones como distintos métodos de pago, compatibilidad con dispositivos móviles y comentarios de los clientes en cada paso. Realiza pruebas rigurosas e itera en función de los datos del usuario.
Expansión internacional: Las preferencias de pago, las normativas y los patrones de fraude varían de unos mercados internacionales a otros, lo que puede complicar la expansión. Asóciate con un proveedor de servicios de pago que tenga presencia internacional y soporte en varias divisas y adapta tu experiencia de pago para que tenga en cuenta los matices culturales y las tendencias de pago regionales. Mantente al día sobre la evolución de los requisitos de cumplimiento de la normativa en cada mercado objetivo.
Escalado: Tu sistema de pagos debe gestionar los picos de tráfico y los picos de transacciones a medida que crece el negocio. Diseña tu integración de pagos teniendo en cuenta la escalabilidad y elige un proveedor con un historial de soluciones flexibles y de gestión de grandes volúmenes. Supervisa de cerca las métricas de rendimiento y planifica de forma proactiva las actualizaciones de capacidad.
Soporte posterior al lanzamiento: La integración de pagos requiere soporte, mantenimiento y actualizaciones constantes para adaptarse a las nuevas tecnologías y a la evolución de las expectativas de los clientes. Prioriza a los proveedores de pagos con un soporte receptivo, una comunicación transparente y una hoja de ruta para futuras mejoras.
Buenas prácticas para los ISV en relación con la integración de pagos
Estas son algunas de las mejores prácticas que deben seguir los ISV al integrar el procesamiento de pagos en su software:
Elige cuidadosamente tu procesador de pagos: Piensa en tu procesador de pagos como un socio estratégico a largo plazo, no solo como un proveedor. Evalúa sus capacidades técnicas, su estrategia en materia de seguridad, su experiencia con los ISV y su adaptación cultural. Antes de firmar un acuerdo de colaboración, plantéate si su visión y trayectoria de crecimiento coincide con la de tu empresa, si respalda tu estrategia de crecimiento global y si ofrece API intuitivas para los desarrolladores.
Prioriza la seguridad: Protege rigurosamente los datos de los titulares de tarjeta. Elige un proveedor de PCI de nivel 1 e implementa medidas de seguridad sólidas en todo tu stack de software, como la tokenización, el cifrado, la detección de fraudes y las evaluaciones periódicas de vulnerabilidades.
Mejora la experiencia del usuario: El flujo de pago debe parecerse a una extensión natural de tu software. Diseña una experiencia del usuario intuitiva que sea compatible con dispositivos móviles, que ofrezca múltiples opciones de pago, proporcione instrucciones claras y gestione los errores con fluidez.
Analiza los datos de las transacciones: La integración de pagos implica el acceso a los datos de las transacciones, que pueden proporcionar información que ayude a ajustar los precios, las tácticas de marketing y la experiencia del cliente. Haz un seguimiento de métricas clave como las tasas de conversión, el valor medio de las transacciones y los ratios de contracargos para tomar decisiones basadas en datos.
Planifica el crecimiento futuro: A medida que el negocio crece y aumentan los volúmenes de transacciones, los sistemas de pago deben seguir el ritmo. Elige un proveedor con la infraestructura y la experiencia necesarias para gestionar el crecimiento futuro y evalúa periódicamente el rendimiento para planificar las actualizaciones de capacidad.
Admite varios métodos de pago: Aceptar distintos métodos de pago, como las tarjetas de crédito, las tarjetas de débito, los monederos digitales y las criptomonedas, puede aumentar la comodidad de los usuarios y las tasas de adopción. Esto es especialmente importante si tu software se dirige a mercados internacionales con diferentes preferencias de pago.
Lleva a cabo las actualizaciones y los procesos de mantenimiento de forma periódica: Las tecnologías de pago y las amenazas a la seguridad están en constante evolución. Las actualizaciones periódicas de tu integración de pagos ayudan a que tu producto siga siendo seguro, eficaz y conforme a la normativa.
Supervisa y analiza las transacciones: Implementa herramientas de supervisión para hacer un seguimiento del rendimiento y la seguridad de tu integración de pagos. El análisis de los datos de transacciones puede ayudarte a identificar tendencias, detectar posibles fraudes y comprender el comportamiento de los usuarios.
El contenido de este artículo tiene solo fines informativos y educativos generales y no debe interpretarse como asesoramiento legal o fiscal. Stripe no garantiza la exactitud, la integridad, la adecuación o la vigencia de la información incluida en el artículo. Debes procurar el asesoramiento de un abogado o un contador competente con licencia para ejercer en tu jurisdicción si deseas obtener asistencia para tu situación particular.