¿Qué es una SA en Francia? ¿Cuáles son sus ventajas? ¿Qué debes saber sobre esta forma jurídica, utilizada por muchas empresas francesas? En este artículo se explica cómo funciona una SA, cómo crearla y las diferencias entre SA, SAS y SARL.
¿De qué trata este artículo?
- ¿Qué es una «société anonyme» (SA)?
- ¿Cuáles son las principales características de una SA?
- ¿Cómo funciona una SA?
- ¿A qué régimen fiscal pertenece una SA?
- ¿Cuáles son los pros y los contras de una SA?
- ¿Cómo se configura una SA?
- Transferencia de una SA
- ¿Cuáles son las diferencias entre SA, SAS y SARL?
¿Qué es una «société anonyme» (SA)?
Una SA, o «société anonyme» (generalmente traducida como una «sociedad anónima» en español), es una forma legal para grandes empresas que desean cotizar en el mercado de valores. Una SA es una sociedad anónima en la que el capital se divide en acciones y los accionistas poseen estas acciones en función de lo que aportan.
A diferencia de la «société par actions simplifiée» (SAS) y de la «société par actions simplifiée unipersonnelle» (SASU), una SA puede recaudar dinero para proyectos mediante una oferta pública. Por lo tanto, sus acciones pueden negociarse en el mercado regulado.
¿Cuáles son las principales características de una SA?
Una SA es adecuada para la mayoría de los sectores empresariales, excepto para los sectores regulados, como las tiendas de tabaco y los seguros.
Número de accionistas
Una SA debe tener dos accionistas o más; este mínimo va hasta siete accionistas si la empresa cotiza en la bolsa de valores. Los accionistas pueden ser personas físicas o jurídicas, como asociaciones o empresas. La responsabilidad de un accionista se limita a la cuantía de sus aportaciones en efectivo o en especie. Los accionistas también tienen derechos financieros, de voto y de información.
Capital social
El capital social mínimo para una SA es de 37.000 €, o 225.000 € si sale a bolsa. La mitad de cualquier contribución en efectivo debe depositarse en la cuenta bancaria de la empresa en el momento del registro. La mitad restante debe aportarse en un plazo de cinco años. Se debe nombrar un auditor de contribuciones para evaluar las contribuciones en especie de la empresa.
¿Cómo funciona una SA?
Una SA puede ser gestionada de dos maneras: ya sea por un consejo de administración y un director general o por un consejo de supervisión y un consejo ejecutivo. Las SA también deben celebrar una junta general de accionistas.
Consejo de administración y CEO
El consejo de administración, formado por entre 3 y 18 miembros, establece la estrategia general de la empresa y se asegura de que funcione en consecuencia. Los miembros del consejo de administración son nombrados por los estatutos o por la junta general de accionistas. El presidente del consejo de administración y el director general son elegidos entre los directores (véase este artículo del gobierno francés para más información sobre el consejo de administración).
El CEO también puede ser el presidente de la junta directiva. En este caso, se convierte en el presidente y CEO de la empresa.
Tenga en cuenta que el mandato del CEO es ilimitado. Sin embargo, la junta directiva tiene la facultad de destituirlos de sus cargos.
Consejo de supervisión y comité ejecutivo
El consejo ejecutivo está formado por entre dos y cinco miembros, o siete si la empresa cotiza en bolsa. El presidente supervisa y dirige este órgano de gestión tras ser nombrado por el consejo de supervisión. El consejo de supervisión tiene de 3 a 18 miembros, que supervisan la gestión y las cuentas de la empresa. El consejo de administración también nombra a los miembros del comité de administración (para más información sobre los diferentes órganos de dirección de una SA, consulta el artículo del Gobierno francés)
Junta general
La SA organiza juntas generales para reunir a todos sus accionistas. En una junta general, la SA nombra a los directores o a los miembros del consejo de supervisión, además de a los auditores legales; distribuye los beneficios de la empresa; modifica los estatutos; aprueba los estados financieros; y disuelve la SA (si es necesario).
¿A qué régimen fiscal pertenece una SA?
Las SA están sujetas automáticamente al impuesto de sociedades (IS, del francés «impôt sur les sociétés»), pero pueden optar por pagar el impuesto sobre la renta (IR) si cumplen ciertos criterios de elegibilidad. Encontrarás más información sobre el cambio del impuesto de sociedades al impuesto sobre la renta en el artículo de las autoridades fiscales francesas.
Régimen fiscal de los administradores
La remuneración del director general y del presidente está sujeta al impuesto sobre la renta en forma de sueldos y salarios. Los miembros del consejo de administración también perciben una cantidad fija, que tributa a un tipo fijo (PFU, del francés «prélèvement forfaitaire unique») del 12,8 % para el impuesto sobre la renta y del 17,2 % para las cotizaciones a la seguridad social.
Del mismo modo, la remuneración de los miembros de la junta ejecutiva está sujeta al impuesto sobre la renta en forma de sueldos y salarios. La remuneración de los miembros del consejo de supervisión está sujeta a la PFU.
Ten en cuenta que todos los ejecutivos asalariados se clasifican como «asimilados» y están cubiertos por el régimen general de la Seguridad Social.
Tributación de los accionistas
Cuando una SA obtiene ganancias, puede pagar dividendos a los accionistas. Los dividendos se clasifican como ingresos de valores mobiliarios. Tributan a un tipo fijo del 30 por ciento, de los cuales el 12,8 por ciento corresponde al impuesto sobre la renta y el 17,2 por ciento a las cotizaciones a la seguridad social.
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¿Cuáles son los pros y los contras de una SA?
Las SA ofrecen varias ventajas para las grandes empresas, entre ellas las siguientes:
- Forma jurídica reconocida por bancos, clientes, proveedores e inversores
- Reparto de competencias entre los órganos gestores
- Facilitar la transferencia de acciones y la incorporación de nuevos accionistas
- Responsabilidad limitada a la cuantía de la contribución
- Posibilidad de operar en el mercado regulado
- Condición de empleado de los directores
Sin embargo, existen algunos inconvenientes con esta forma legal:
- Requisito mínimo de capital social
- El nombramiento de un auditor de contribuciones es obligatorio y puede ser costoso, entre 500 € y 3.000 €
- Trámites administrativos complicados
¿Cómo se configura una SA?
Hay cinco pasos principales para establecer una SA:
- Redactar los estatutos o la escritura de constitución (documento que detalla las reglas de funcionamiento, fiscales y jurídicas de la empresa) y elegir el nombre de la empresa.
- Domiciliar o elegir una sede social
- Depositar el capital social en la cuenta bancaria de la empresa
- Publicar un aviso de constitución en una gaceta legal
- Registrar la SA en línea a través de un portal de trámites comerciales. Para obtener más información sobre el registro de una SA, consulta el artículo del gobierno francés sobre el tema.
Costes asociados con la creación de una SA
La creación de una SA suele ser costosa. Por ejemplo, contratar a un profesional del derecho para redactar los estatutos puede costar entre 1.500 y 2.000 euros.
La evaluación del auditor de contribuciones podría costar entre 500 y 3.000 euros. El coste de la publicación de un aviso de constitución se fija en 387 euros para las SA.
En el caso de una SA que ejerza actividades comerciales, cabe esperar que pagues 37,45 €, más 15 € adicionales para actividades artesanales. También tendrás que pagar una comisión de 21,41 € para declarar los beneficiarios efectivos de la empresa.
Por último, el coste de domiciliar tu empresa variará en función de la opción que elijas. Si tu domicilio social se encuentra en una incubadora de empresas, una empresa de domiciliación o en un local comercial, corres el riesgo de pagar tasas más elevadas.
Transferencia de una SA
En general, puedes transferir las acciones de una SA a un miembro de la familia o a un tercero. Cuando se transfieren acciones, el comprador paga un gravamen registral fijo del 0,1 % del precio de transferencia cuando se informa de la transferencia a las autoridades fiscales. Sin embargo, esta tasa se eleva al 5 % para transferencias que involucran a una empresa que posee principalmente activos inmobiliarios.
¿En qué se diferencian las SA, las SAS y las SARL?
Existen varias diferencias básicas entre las SA, las SAS y las SARL (o "société à responsabilité limitée"). En el cuadro siguiente se resumen las principales características de estas formas jurídicas:
|
Funciones
|
S.A.
|
SAS
|
SARL
|
|---|---|---|---|
| Número de accionistas | Mínimo de 2 (o 7 si la empresa se incluye en la bolsa de valores) | Mínimo de 2 | Entre 2 y 100 |
| Capital social | Mínimo de 37.000 € (o 225.000 € si la empresa cotiza en bolsa) | Determinado por los accionistas | Determinado por los accionistas |
| Acciones de la empresa | Acciones | Acciones | Unidades empresariales |
| Entrada al mercado | Autorizado | No autorizado | No autorizado |
| Director | Consejo de administración y director general o consejo de supervisión y consejo ejecutivo | Presidente | Uno o más directores ejecutivos |
| Transferencia de acciones | Sin restricciones | Sin restricciones | Sin restricciones para un miembro de la familia, sujeto a la aprobación de los accionistas cuando se transfieren acciones a un tercero |
| Comisiones de registro | 0,1 % del precio de venta | 0,1 % del precio de venta | 3 % del precio de venta, después de una deducción de 23.000 € |
El contenido de este artículo tiene solo fines informativos y educativos generales y no debe interpretarse como asesoramiento legal o fiscal. Stripe no garantiza la exactitud, la integridad, la adecuación o la vigencia de la información incluida en el artículo. Debes procurar el asesoramiento de un abogado o un contador competente con licencia para ejercer en tu jurisdicción si deseas obtener asistencia para tu situación particular.