Si vendes servicios digitales o envías bienes a clientes en Nueva Zelanda (NZ), es posible que debas cobrar el impuesto sobre bienes y servicios (GST), incluso si tu negocio opera completamente en el extranjero. Los requisitos del GST están vigentes desde hace un tiempo, pero muchos vendedores internacionales siguen malinterpretando qué se requiere, cuándo entra en vigor el registro y cómo funciona realmente el sistema. El umbral del GST es más bajo de lo que podrías pensar y se pueden imponer sanciones si cometes errores. A continuación, analizaremos cómo funciona el GST en las compras en el extranjero en Nueva Zelanda y qué debes hacer con tu empresa para cumplirlo.

¿Qué contiene este artículo?

• ¿Cuál es el GST de Nueva Zelanda para las compras en el extranjero?
  
• ¿Cuál es el umbral del GST para las empresas extranjeras que venden en Nueva Zelanda?
  
• ¿Qué vendedores están obligados a cobrar el GST en ventas en el extranjero a Nueva Zelanda?
  
• ¿Cómo se aplica el GST a los servicios digitales y las compras en línea?
  
• ¿Cómo afecta el GST a los clientes de Nueva Zelanda que compran a vendedores internacionales?
  
• ¿Cómo registra para el GST las empresas extranjeras en Nueva Zelanda y cómo remiten?
  
• ¿Cuáles son las sanciones para las empresas extranjeras que no cumplen con las reglas del GST?
  

¿Cuál es el GST de Nueva Zelanda para las compras en el extranjero?

El GST de Nueva Zelanda es un impuesto del 15 % sobre la mayoría de los bienes y servicios vendidos a nivel nacional, incluidos los importados del extranjero. Esto incluye lo siguiente:

• Bienes tangibles enviados a Nueva Zelanda: estos pueden incluir ítems como ropa, aparatos electrónicos y artículos para el hogar.
  
• Servicios y productos intangibles: algunos ejemplos incluyen suscripciones de streaming, software y consultoría digital.
  

Si un cliente de Nueva Zelanda compra el bien o servicio y lo utiliza localmente, se aplica el GST, independientemente de dónde esté establecido el vendedor.

¿Cuál es el umbral del GST para empresas extranjeras que venden en Nueva Zelanda?

El umbral de registro del GST en Nueva Zelanda es de $60,000 dólares neozelandeses (NZD) en ventas sujetas a impuestos a clientes de Nueva Zelanda durante un período de 12 meses. Ese umbral se aplica igualmente a vendedores extranjeros y locales.

Si tienes un negocio en el extranjero, tienes la obligación de registrarte para el GST si tus ventas sujetas a impuestos a clientes de Nueva Zelanda superaron $60,000 NZD en los últimos 12 meses o se espera que superen $60,000 NZD en los próximos 12 meses. Es un umbral continuo, por lo que no está vinculado al año calendario. Como resultado, necesitas monitorear continuamente tus ventas.

¿Qué vendedores están obligados a cobrar el GST por ventas en el extranjero de Nueva Zelanda?

Si te estableciste fuera de Nueva Zelanda y vendes a clientes de NZ, hay una buena posibilidad de que debas cobrar un 15 % de GST. Las reglas son amplias y se aplican a comerciantes minoristas tradicionales y no tradicionales. Estos son los tipos de vendedores que generalmente están obligados a cobrar el GST después de cruzar el umbral de ingresos.

Vendedores directos en el extranjero

Si tienes una empresa extranjera que vende bienes o servicios directamente a neozelandeses, ya sea a través de tu sitio web, una aplicación, por teléfono o de otra manera, necesitas registrarte para el GST y comenzar a cobrar el impuesto. Esto incluye lo siguiente:

• Comerciantes minoristas en línea que envían productos físicos a Nueva Zelanda.
  
• Software como servicio (SaaS) o empresas de software que venden descargas o suscripciones.
  
• Cualquier proveedor de servicios que entregue a clientes establecidos en Nueva Zelanda.
  

El GST no solo se aplica a las empresas con presencia física en Nueva Zelanda; se basa en la ubicación de tu cliente.

Marketplaces en línea

Si la venta de un servicio listado ocurre a través de un marketplace, la plataforma es responsable del GST. Los servicios listados incluyen transporte compartido y solicitado, entrega de alimentos y bebidas, y alojamientos de corta estancia sujetos a impuestos. Se trata a los operadores de marketplace como el proveedor en estas situaciones, lo que significa que manejan la recolección y declaración del GST.

Reenvíos y servicios de compras personales

Algunas empresas actúan como intermediarios entre vendedores extranjeros y clientes de Nueva Zelanda; por ejemplo, una empresa podría proporcionar una dirección de envío local en otro país, recibir mercancías allí y luego reenviar las mercancías a Nueva Zelanda. Estos “reenvíos” generalmente están obligados a cobrar el GST si el vendedor original no lo hizo ya.

¿Cómo se aplica el GST a los servicios digitales y las compras en línea?

Desde 2016, las empresas extranjeras están obligadas a cobrar GST por “servicios remotos” vendidos a residentes de Nueva Zelanda una vez que cruzan el umbral de registro. Estos servicios incluyen lo siguiente:

• Streaming y contenido digital: películas, música y libros electrónicos son ejemplos comunes.
  
• Descargas de software y aplicaciones: estos pueden incluir plataformas basadas en la nube, juegos móviles y herramientas SaaS.
  
• Servicios no digitales: algunos ejemplos incluyen servicios legales, contabilidad, consultoría y seguros generales.
  

¿Cómo afecta el GST a los clientes de Nueva Zelanda que compran a empresas internacionales?

A partir de diciembre de 2019, las empresas extranjeras que vendían bienes valorados en $1,000 NZD o menos debían comenzar a recaudar el GST si alcanzaban el umbral de registro. La ampliación del GST a las compras en el extranjero transformó la experiencia del cliente en Nueva Zelanda. Ahora, independientemente de si el vendedor es residente o internacional, los precios son más coherentes, las comisiones son más predecibles y los impuestos se aplican de manera más equitativa.

Antes del cambio de regla, las empresas extranjeras no tenían que preocuparse por el GST. La Aduana de Nueva Zelanda cobraba el GST por artículos de más de $60 NZD, y los ítems de menos de $60 NZD no tenían GST en absoluto. Según estas reglas, un ítem de $50 comprado a un comerciante minorista extranjero hubiera costado $50 en total, mientras que el mismo ítem en una tienda de Nueva Zelanda tendría que agregar el GST y tendría un costo de $57.50. Ahora, esa misma compra en el extranjero también incluye GST. Eso significa que los precios de los vendedores extranjeros son un poco más altos de lo que solían ser, pero también significa que ya no hay una brecha de precios basada en impuestos que incentive las compras en empresas extranjeras.

Para ítems valorados en $1,000 NZD o menos, el vendedor ahora cobra un 15 % de GST en el proceso de compra y el cliente no paga otro monto en la frontera. Los bienes valorados en más de $1,000 NZD aún se deben despachar en la aduana.

¿Cómo registra para el GST las empresas extranjeras en Nueva Zelanda y cómo remiten?

Si tu empresa está establecida fuera de Nueva Zelanda y supera el umbral anual de $60,000 NZD en ventas a neozelandeses, debe registrarse para el GST. Una vez registrada, debes cobrar un 15 % en ventas calificadas y presentar declaraciones ante el Departamento de Ingresos Internos (IRD). El proceso es accesible para no residentes, y no es necesario tener una entidad o ser agente local. A continuación, te explicamos paso a paso cómo funciona.

Registrarte para el GST

Puedes registrarte en línea a través del portal de impuestos del IRD, myIR. Después de enviarlo, el IRD procesa los registros en un plazo de 10 días hábiles. Si se aprueba, el IRD emitirá un número del GST, que te permite comenzar a operar en el sistema del GST de Nueva Zelanda.

Aceptar pagos del GST en ventas elegibles a clientes de Nueva Zelanda

Después de registrarte, debes cobrar un 15 % del GST en todas las transacciones sujetas a impuestos realizadas en Nueva Zelanda. Tu sistema del proceso de compra debe detectar cuando un cliente califica como residente en el país. Estos son algunos de los indicadores comunes:

• La dirección de envío del cliente.
  
• La selección de país en el perfil del cliente.
  
• La dirección de Protocolo de Internet (IP) del cliente o el prefijo de su número de teléfono.
  

Puedes mostrar el GST como una partida o sumarlo a un precio con impuestos incluidos. En cualquier caso, debes comunicar claramente el total que incluya el GST en el punto de venta y emitir recibos a los clientes o facturas a los clientes B2B que muestren lo siguiente:

• El total
  
• El GST cobrado
  
• Tu número del GST
  
• Una descripción de los bienes o servicios
  

Las empresas o marketplaces suelen gestionar esto en sus sistemas de pago. Por ejemplo, Stripe Tax puede calcular y aplicar automáticamente el GST de Nueva Zelanda según la ubicación del cliente y el tipo de compra.

Presentar declaraciones del GST y remitir el pago al IRD

Como titular de una empresa registrada para el GST, debes presentar declaraciones habituales y remitir cualquier GST recaudado. Puedes presentarlas a través del portal myIR.

Cada declaración requiere que informes:

• El valor total de las ventas sujetas a impuestos realizadas en Nueva Zelanda.
  
• El total del GST recaudado sobre esas ventas.
  
• Cualquier corrección de períodos anteriores, según sea necesario.
  

Como proveedor no residente, en general no reclamarás créditos fiscales por el GST que tu empresa pagó en gastos, lo que significa que tus declaraciones del GST reflejarán principalmente el impuesto final recaudado. En la mayoría de los casos, esto simplifica el proceso de presentación.

Los pagos deben hacerse en moneda NZD. Si cobras a los clientes en otra moneda, tendrás que convertir el total a dólares neozelandeses para fines de informes.

Después de enviar una declaración y un pago, se te considerará en cumplimiento para ese período. El proceso se repite para cada ciclo de presentación subsiguiente.

Guardar los registros durante siete años

El IRD requiere que las empresas conserven registros impositivos, incluidas facturas e ingresos, durante al menos siete años. Estos registros deben ser lo suficientemente detallados como para demostrar la naturaleza de cada venta y por qué se aplicó el GST o no se hizo.

¿Cuáles son las sanciones para las empresas extranjeras que no cumplen con las reglas del GST?

Nueva Zelanda toma en serio el cumplimiento del GST, incluso si tu negocio opera completamente en el extranjero. Si estás obligado a registrarte y no lo haces, o si informas menos de lo real, el IRD puede reclamar impuestos atrasados, sanciones e incluso tomar acciones legales. Analicemos mejor las posibles sanciones por no seguir la ley del GST.

No pagar el GST

Si tenías que registrarte, pero no lo hiciste, o si no cobraste el GST en las ventas cuando correspondía, el IRD puede exigir el impuesto no pagado. Esto se aplica de forma retroactiva, posiblemente desde el momento en que superaste el umbral de registro por primera vez.

Aumento de las penalizaciones por pagos tardíos

Además del impuesto en sí, las penalizaciones por pagos tardíos aumentan rápidamente:

• Se agrega un 1 % el día después de la fecha de vencimiento.
  
• Se agrega un 4 % adicional después de 7 días.
  
• Se agrega un 1 % adicional por mes mientras el saldo permanezca impago.
  

Cuanto más largo sea el retraso, más costoso será resolver el problema.

Penalizaciones fijas por devoluciones tardías del GST

Incluso si estás cobrando el GST correctamente, no presentar las devoluciones a tiempo sigue siendo una infracción. Se cobra una penalización estándar de $50 NZD o $250 NZD por cada devolución tardía, según tu base contable. No pagar a tiempo los plazos de presentación, o no presentarlos en absoluto, puede desencadenar consecuencias más graves.

Penalizaciones por déficit

Si estás registrado, pero reportas menos del GST, ya sea por accidente o de forma intencional, el IRD puede aplicar penalizaciones por déficit basadas en la gravedad del error. El IRD generalmente cobra estos montos:

• El 20 % del déficit del impuesto por falta de cuidado razonable.
  
• El 40 % del déficit por negligencia grave.
  
• El 150 % del déficit por evasión fiscal.
  

Estas penalizaciones se suman todas las obligaciones de pagar el impuesto subyacente.

Cargos penales

El incumplimiento intencional, particularmente en el caso de devoluciones fraudulentas o evasión deliberada, puede llevar a un proceso penal. Estas son las posibles consecuencias legales:

• Multas graves
  
• Procesos judiciales
  
• En casos extremos, prisión
  

Como mínimo, un registro de incumplimiento puede prevenir el acceso a marketplaces de confianza o crear problemas de reputación que bloqueen la futura expansión en el país.

Es favorable para los vendedores presentarse si se dan cuenta de que deberían haberse registrado o cobrar el GST, pero no lo hicieron. La revelación voluntaria antes de que comience una investigación puede ayudar a una empresa a reducir o evitar sanciones por completo.