La zona única de pagos en euros (SEPA, por sus siglas en inglés) facilita a las empresas y clientes realizar y recibir pagos en euros a nivel internacional. Desde el 1 de febrero de 2014, todos los países del Espacio Económico Europeo (EEE) son también miembros de la zona SEPA, lo que estandariza las transacciones de pago en Europa. Actualmente, hay 36 países en la zona SEPA (hasta junio de 2023). Este artículo ofrece una lista completa de los países incluidos en la zona SEPA y explica los beneficios de las transferencias de crédito SEPA, así como por qué les pueden resultar útiles a empresas y clientes.

¿Qué contiene este artículo?

• ¿Qué es la zona SEPA?
  
• Beneficios de pertenecer a la zona SEPA
  
• ¿Qué países están dentro de la zona SEPA?
  
• ¿Qué países están excluidos de la zona SEPA?
  
• ¿Suiza está incluida en la zona SEPA?
  
• ¿El Reino Unido forma parte de la zona SEPA?
  

¿Qué es la zona SEPA?

SEPA es una red de pagos europea que permite a clientes y empresas realizar transacciones bancarias a nivel internacional de forma rápida y segura. La zona SEPA se estableció para hacer posible el mercado único de la Unión Europea (UE).

La zona SEPA permite a clientes y empresas realizar transferencias de crédito en toda Europa en cuestión de segundos. Con algunas excepciones, como Suiza y el Reino Unido, no es necesario hacer ninguna conversión de moneda y todas las transacciones se llevan a cabo fácilmente a través de la banca en línea. Esta zona garantiza que tanto particulares como empresas puedan enviar fondos de forma fácil, segura y eficiente dentro de Europa.

En general, los clientes y empresas se benefician de transacciones de pago más eficientes y una gestión más fácil de transferencias nacionales e internacionales. Esto convierte a la zona SEPA en un gran avance para lograr una Europa unificada en la que se puedan hacer transferencias de crédito sin restricciones. Obtén más información sobre los pagos mediante débito directo SEPA aquí.

Beneficios de pertenecer a la zona SEPA

La zona SEPA agiliza, facilita y permite hacer transferencias y débitos directos dentro de Europa. Los adeudos directos y las transferencias de crédito SEPA estandarizadas ayudan a las empresas a trabajar de manera más efectiva al reducir los costos de las transacciones internacionales y aumentar la transparencia para los clientes y los bancos.

La zona SEPA también garantiza que cada destinatario tenga los datos bancarios correctos para que el importe se transfiera a tiempo y sin ningún desvío. También existen pautas más estrictas para las quejas de los clientes y las opciones de contracargos. Además, ya no hay diferentes regulaciones nacionales, lo que facilita que las empresas crezcan. Las transferencias se pueden procesar en un día hábil. También hay números de cuenta y códigos bancarios estandarizados: el número internacional de cuenta bancaria (IBAN) y el código de identificación bancaria (BIC). El IBAN se puede usar en todas las transferencias de crédito nacionales e internacionales, por lo que no es necesario completar diferentes formularios según cada país y moneda.

La zona única de pagos también aumentará la competencia entre los bancos. Todos los bancos de la zona SEPA deben cumplir la misma norma, por lo que los clientes pueden elegir entre varios de ellos y hay una mayor variedad de productos y servicios a precios competitivos. Además, los clientes y las empresas ya no tendrán que pagar comisiones por transferencias internacionales en la zona SEPA. Otra ventaja es el aumento en la seguridad de las transacciones. Todos los miembros de la zona SEPA deben cumplir con estrictas normas de seguridad para evitar el fraude y todas las transacciones de esta zona están protegidas por el mismo marco legal establecido en el reglamento SEPA.

¿Qué países están dentro de la zona SEPA?

Hay 36 países en la zona SEPA, incluidos todos los Estados miembros de la UE. La zona SEPA permite que clientes y empresas hagan transferencias de crédito y pagos mediante débito directo en euros a otros países de una forma tan sencilla y segura como si se tratara de transacciones nacionales.

Lista de países de la zona SEPA

La zona SEPA está formada por los 27 Estados miembros de la UE (Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Malta, los Países Bajos, Polonia, Portugal, la República Checa, Rumanía y Suecia) al igual que Andorra, Ciudad del Vaticano, Mónaco, el Reino Unido, San Marino, Suiza y los tres países del EEE: Islandia, Liechtenstein y Noruega. Los procedimientos estandarizados de transacciones de pago sin efectivo a nivel europeo se pueden usar en todos estos países.

¿Qué países están excluidos de la zona SEPA?

Si bien la zona SEPA abarca la mayoría de Europa, hay algunos países que no forman parte de ella, como las islas Feroe danesas y Groenlandia. La divisa nacional de Kosovo y Montenegro es el euro, pero no forman parte de la zona SEPA. Por ello, es importante que las empresas y los clientes conozcan bien qué países no forman parte actualmente de la zona SEPA, ya que cada uno de ellos puede tener diferentes normativas. También hay algunos países que usan el IBAN, pero que no son miembros de la zona SEPA, como Albania, Arabia Saudí, Bielorrusia, Brasil, Emiratos Árabes Unidos, Turquía y Ucrania.

¿Suiza está incluida en la zona SEPA?

Sí, Suiza es miembro de la zona SEPA desde 2015. Las empresas y los particulares de este país también pueden disfrutar de los beneficios de las transacciones de pago SEPA: pagos internacionales más rápidos y simplificados, así como un menor esfuerzo al procesar transferencias de crédito o débitos directos SEPA, entre otros. Las transferencias SEPA dirigidas a Suiza suelen ser gratuitas, pero pueden estar sujetas a comisiones por conversión de monedas.

¿El Reino Unido forma parte de la zona SEPA?

Sí. El Reino Unido sigue siendo miembro de la zona SEPA. Aunque el Reino Unido dejó la UE el 1 de febrero de 2021, todavía forma parte de la zona SEPA. Ser miembro de la UE no es un requisito para pertenecer a la zona SEPA. La mayoría de los proveedores de servicios bancarios sigue ofreciendo servicios de transferencias internacionales en el Reino Unido.