Los tipos impositivos del impuesto sobre las ventas varían según las jurisdicciones nacionales, estatales, municipales y locales. Como consecuencia, para cobrar el importe correcto en concepto de impuesto sobre las ventas es imprescindible conocer cuál es la dirección del domicilio de tu cliente. Suena muy sencillo, pero si las direcciones postales de facturación y envío no coinciden, el panorama se complica. ¿Qué dirección debería utilizar la empresa para calcular el impuesto sobre las ventas a la hora de vender bienes físicos?
El objetivo de este artículo es que entiendas cómo se debe utilizar la dirección postal de tus clientes para determinar cuál es el tipo impositivo correcto del impuesto sobre las ventas si les vendes bienes físicos. Eso sí, conviene que no olvides que aquí tan solo te ofrecemos información general al respecto. Lo más recomendable es que consultes a un especialista en fiscalidad para que te asesore sobre tu negocio específico.
¿De qué trata este artículo?
- Principios básicos del lugar de imposición del impuesto sobre las ventas en EE. UU.
- Dirección de envío y dirección de facturación: ¿cuál usamos si vendemos bienes físicos?
- Cobrar el impuesto sobre las ventas por el envío
Principios básicos del lugar de imposición del impuesto sobre las ventas en EE. UU.
Los tipos impositivos del impuesto sobre las ventas se basan en el punto de tributación, o sea, en el momento y el lugar donde se produce una transacción. Varía según la ubicación del cliente. Por este motivo, las tiendas físicas convencionales no tienen ningún problema en este aspecto, ya que su punto de tributación es precisamente ese, su establecimiento. El tipo impositivo correcto para el impuesto sobre las ventas en este caso es el que corresponde al lugar donde esté ubicada la tienda.
Sin embargo, en el caso de empresas que envían productos a clientes de otros lugares dentro de los EE. UU., para determinar cuál es el punto de tributación hay que tener en cuenta todo el país al completo. Los estados suelen exigir a las empresas que cobren el impuesto sobre ventas de una de estas dos formas:
- cobro con imposición en origen;
- cobro con imposición en destino.
Este concepto se conoce habitualmente como «lugar de imposición del impuesto sobre las ventas». En los estados que basan el impuesto sobre las ventas en el lugar de origen, los vendedores se lo cobran a sus clientes de ese estado en el punto de origen de la venta, o bien donde la empresa recibe el pedido. Por ejemplo: si gestionas un negocio ubicado en un estado como Ohio, que basa el impuesto sobre las ventas en el lugar de origen, debes cobrar a todos tus clientes de Ohio el tipo impositivo del impuesto sobre las ventas según la ubicación de tu empresa, porque es ahí donde se originó el pedido. En este ejemplo, la dirección de facturación y la de envío del cliente son irrelevantes. Ahora bien; esto solo es válido para los clientes de Ohio, ya que las ventas interestatales siempre están sujetas a la obligación de cobro de impuestos según el destino.
Las empresas que estén establecidas en estados con imposición en destino tienen la obligación de cobrar el tipo impositivo correspondiente a la dirección de envío del cliente (u otra dirección de destino). Como empresa, debes cobrar el tipo del impuesto sobre ventas del lugar en el que se encuentre tu cliente. La mayoría de los estados usa este tipo de imposición del impuesto sobre ventas.
Dirección de envío y dirección de facturación: ¿cuál usamos si vendemos bienes físicos?
Teniendo en cuenta todo esto, ¿deberían las empresas cobrar el impuesto sobre las ventas de EE. UU. según la dirección de envío o según la dirección de facturación del cliente?
En el caso de una transacción de e-commerce basada en la imposición en destino (o interestatal), se considera que el lugar de tributación es la ubicación donde el cliente toma posesión del producto adquirido. Se trata de la dirección de envío, o sea, que tu empresa tendría que usar esa dirección postal para calcular el impuesto sobre las ventas, y prescindir de la dirección de facturación.
Cobrar el impuesto sobre las ventas por el envío en EE. UU.
¿Son gravables los cargos por envío? Este detalle varía de un estado a otro, así que aquí nos limitamos a describir brevemente a continuación cómo lo enfoca cada uno.
Los siguientes estados consideran que los gastos de envío están sujetos a impuestos si se cobran como parte de un pedido, siempre y cuando el artículo que se envíe se considere también gravable. Da igual si los cargos por envío figuran incluidos en el precio del artículo o si se indican por separado respecto de ese precio básico.
- Arkansas
- Connecticut
- Distrito de Columbia
- Georgia
- Hawái
- Indiana
- Kentucky
- Minnesota
- Mississippi
- Nebraska
- Nueva Jersey
- Nuevo México
- Nueva York
- Carolina del Norte
- Dakota del Norte
- Ohio
- Pensilvania
- Rhode Island
- Carolina del Sur
- Dakota del Sur
- Tennessee
- Texas
- Vermont
- Washington
- Virginia Occidental
- Wisconsin
Para los siguientes estados, su legislación decreta que los cargos por envío no están sujetos a impuestos si se indica el cargo por separado respecto del precio de venta del artículo. Sin embargo, si el cargo se incluye como parte del precio de ese artículo, sí son gravables.
- Alabama
- Arizona
- California
- Colorado
- Florida
- Idaho
- Illinois
- Iowa
- Kansas
- Luisiana
- Maine
- Maryland
- Massachusetts
- Michigan
- Misuri
- Nevada
- Oklahoma
- Utah
- Virginia
- Wyoming
El contenido de este artículo tiene solo fines informativos y educativos generales y no debe interpretarse como asesoramiento legal o fiscal. Stripe no garantiza la exactitud, la integridad, adecuación o vigencia de la información incluida en el artículo. Si necesitas asistencia para tu situación particular, te recomendamos consultar a un abogado o un contador competente con licencia para ejercer en tu jurisdicción.