Dado que se espera que el 59 % de las ventas por Iinternet a nivel mundial se realicen a través de marketplaces en línea en 2027, y que las plataformas permitan realizar un sinfín de otras interacciones, está claro que ambos modelos han consolidado su papel en el comercio moderno. Si bien tanto los marketplaces como las plataformas ofrecen oportunidades únicas de crecimiento y generación de ingresos, elegir entre ellos puede dar forma fundamental a la estrategia, las interacciones con los usuarios y la trayectoria a largo plazo de una empresa.
Sin embargo, la decisión entre adoptar un modelo de marketplace o un modelo de plataforma no es una cuestión de blanco o negro. Ambos modelos tienen su propio conjunto de ventajas y desafíos. Comprender estas diferencias no se trata solo de elegir un camino, sino de obtener un panorama completo respecto de las capacidades y expectativas de tu empresa, y de las necesidades de tu base de usuarios, y alinear estos conocimientos con la infraestructura más adecuada para tu empresa.
Abordaremos las principales características de los marketplaces y las plataformas, su dinámica operativa y cómo decidir qué modelo es el más adecuado para tu empresa.
¿Qué contiene este artículo?
- ¿Qué es un marketplace?
- Características clave de un marketplace
- ¿Qué es una plataforma?
- Características clave de una plataforma
- ¿Cuál es la diferencia entre un marketplace y una plataforma?
- Cómo elegir entre crear un marketplace o una plataforma
¿Qué es un marketplace?
Un marketplace es una plataforma digital o centro de e-commerce donde se compra, vende e intercambia una amplia gama de bienes, servicios o contenidos digitales. Estas plataformas actúan como facilitadores intermediarios, a modo de nexo entre compradores y vendedores. Permiten simplificar el procesamiento de transacciones y pueden proporcionar una variedad de herramientas para ayudar a administrar y optimizar estas transacciones.
Los marketplaces modernos pueden ofrecer diferentes tipos de modelos de comercio en función de su diseño y público objetivo. Esto incluye modelos B2C (Business-to-Consumer), B2B (Business-to-Business), C2C (Consumer-to-Consumer) y P2P (Peer-to-Peer), cada uno de los cuales satisface las necesidades únicas de sus respectivos participantes.
En un modelo B2C, las empresas venden sus productos o servicios directamente al consumidor final. Por otro lado, un modelo B2B facilita las transacciones entre dos empresas, como fabricantes, mayoristas y minoristas. El modelo C2C proporciona una plataforma para que los consumidores vendan a otros consumidores y, a menudo, se utiliza para productos de segunda mano o artesanales. El modelo P2P permite a las personas intercambiar bienes y servicios directamente, lo que generalmente se realiza a través de una plataforma descentralizada.
Algunos ejemplos de estas plataformas de marketplaces son eBay y Amazon, que se adaptan tanto a los modelos B2C como C2C. Ofrecen una amplia selección de productos de una gran variedad de vendedores, lo que les da a los consumidores la libertad de elegir en función de sus preferencias. Alibaba es otra plataforma de marketplace, pero se centra principalmente en el modelo B2B y proporciona un espacio para que las empresas de todo el mundo se conecten y comercien entre sí. Etsy es un marketplace único en el sentido de que está diseñado principalmente para los modelos C2C y B2B, y se especializa en productos artesanales y antiguos, y en suministros para manualidades.
Características clave de un marketplace
Hay una serie de características que dan forma a la manera en que los compradores y los vendedores interactúan dentro de los marketplaces:
Gran variedad de vendedores y compradores
Esto resalta la diversidad intrínseca de un marketplace. A diferencia de una tienda en línea tradicional, que presenta productos o servicios de un solo proveedor, un marketplace es un punto de encuentro digital para numerosos vendedores y compradores independientes. Esta variedad permite ofrecer una amplia selección de productos y servicios, lo que posibilita a los compradores comparar y elegir en función de factores como el precio, la calidad y las calificaciones del vendedor.Confianza y transparencia
Los marketplaces suelen incorporar funcionalidades para garantizar la confianza y la transparencia entre compradores y vendedores. Estas pueden incluir sistemas para calificar a los vendedores y escribir reseñas sobre estos, información clara y completa sobre los productos y procesos seguros para las transacciones.Regulación y mediación
El operador del marketplace administra la plataforma, garantiza que las transacciones se completen de manera efectiva, actúa como mediador en caso de disputas entre compradores y vendedores, administra los pagos y, a menudo, cobra una comisión sobre las ventas como remuneración por estos servicios.Facilidad de uso y accesibilidad
La tecnología moderna ha hecho que los marketplaces que operan en línea sean muy accesibles y fáciles de usar. Los compradores pueden buscar y comprar productos de diferentes vendedores en un solo lugar, mientras que los vendedores pueden llegar a una base de clientes más amplia de lo que podrían hacerlo a través de una tienda física tradicional.Información basada en datos
Los marketplaces que operan en línea pueden recopilar grandes cantidades de datos sobre el comportamiento de los consumidores, lo que puede proporcionar a los vendedores información y análisis valiosos para ayudarles a optimizar sus ofertas y mejorar sus estrategias de ventas.
Cada una de estas características contribuye a la eficacia y al atractivo de un marketplace, y lo convierte en un componente importante del panorama comercial moderno.
¿Qué es una plataforma?
Una plataforma es una infraestructura o ecosistema digital que facilita la interacción entre múltiples partes, a menudo con el fin de realizar transacciones comerciales. Esto podría incluir el intercambio de bienes, servicios o información. El operador de la plataforma proporciona la tecnología subyacente y establece las reglas sobre cómo se producen estas interacciones.
Las plataformas pueden adoptar muchas formas y abarcar varios sectores, pero son más habituales en los sectores minorista, financiero y tecnológico. Algunos ejemplos son las plataformas de e-commerce como Amazon, las plataformas de viajes compartidos como Uber o las plataformas de redes sociales como Facebook. Cada una de ellas proporciona un entorno digital en el que los usuarios, ya sean empresas o particulares, pueden interactuar, realizar transacciones o ambas cosas.
A diferencia de los modelos de negocio tradicionales que se centran en ofrecer un producto o servicio específico al cliente, las empresas que ofrecen plataformas crean valor principalmente al facilitar las conexiones y las interacciones. Por ejemplo, Uber no posee automóviles ni emplea conductores como lo hacen las empresas de taxis tradicionales. En su lugar, conecta a los conductores independientes con personas que necesitan viajes y cobra una tarifa por facilitar la transacción.
En esencia, las plataformas son multilaterales, lo que significa que involucran a dos o más grupos de usuarios que se brindan mutuamente beneficios a través de la red. El valor de una plataforma aumenta a medida que se unen más usuarios, un fenómeno conocido como efecto de red. Por ejemplo, cuantos más vendedores haya en Amazon, mayor será la variedad de productos, lo que atrae a más compradores y, a su vez, atrae a aún más vendedores.
Las plataformas se han convertido en una fuerza importante en la economía global debido a la escalabilidad de su modelo de negocio y su capacidad para acceder a una amplia base de usuarios digitales. Al reducir los costos de transacción y aumentar la eficiencia, han remodelado numerosos mercados y continúan impulsando la innovación.
Características clave de una plataforma
Cuando se habla de plataformas dentro del ámbito del comercio moderno, hay varias características clave a tener en cuenta:
Efecto de red
Este término se refiere al fenómeno en el que el valor de un servicio aumenta a medida que más personas lo utilizan. En una plataforma, a medida que se unen más usuarios, aumentan los beneficios para todos los usuarios. Por ejemplo, cuantos más vendedores haya en una plataforma, más opciones tendrán los compradores, lo que a su vez atrae a más vendedores debido a la mayor actividad de los compradores.Multilateralidad
Las plataformas son esencialmente multilaterales, lo que significa que satisfacen las necesidades de dos o más grupos de usuarios distintos que contribuyen a la red y se benefician de ella. Por ejemplo, una plataforma de viajes compartidos satisface las necesidades tanto de los conductores como de los pasajeros, quienes se proporcionan valor entre sí.Facilitación de interacciones
Las plataformas no solo venden productos o servicios; también facilitan las interacciones entre diferentes grupos de usuarios. Estas interacciones pueden consistir en transacciones, comunicaciones o intercambios de información. El papel del operador de la plataforma es hacer que estas interacciones sean lo más fluidas y beneficiosas posible para todas las partes involucradas.Creación y captura de valor
Las plataformas crean valor mediante las conexiones que facilitan. Esto podría tratarse de valor económico a través de comisiones por transacción, o valor social a través de la creación de comunidades. Las plataformas también capturan valor al cobrar por el acceso a la red o monetizar los datos generados en la plataforma.Escalabilidad
Debido a su naturaleza digital, las plataformas pueden escalar de manera rápida y eficiente. En general, a medida que crece la base de usuarios de la plataforma, disminuye el costo de atender a usuarios adicionales. Esta escalabilidad es una ventaja clave de los modelos de negocio de plataforma, ya que les permite llegar a una audiencia global y, potencialmente, lograr un rápido crecimiento.Gobernanza
Las plataformas requieren reglas y normativas que garanticen que las interacciones sean justas y beneficiosas para todos los grupos de usuarios. Estas reglas son establecidas y aplicadas por el operador de la plataforma, que debe equilibrar las necesidades de todas las partes para mantener un ecosistema de plataforma saludable y próspero.
¿Cuál es la diferencia entre un marketplace y una plataforma?
Si bien los términos «marketplace» y «plataforma» a menudo se usan indistintamente en el contexto del comercio moderno, no son exactamente lo mismo. Ambos desempeñan un papel integral en el comercio digital, pero sus modelos operativos, funciones principales y objetivos pueden variar.
Marketplace
Un marketplace facilita la compra y venta de bienes o servicios. Sirve como un lugar digital donde varios vendedores independientes pueden hacer un listado de sus ofertas y venderlas a una amplia gama de compradores. Este modelo se centra en facilitar las transacciones, y el operador del marketplace se lleva una comisión por cada venta. Esencialmente, un marketplace es el equivalente digital de un mercado presencial tradicional.
Una representación clásica de un marketplace es eBay. Los vendedores particulares y las empresas ponen sus productos a la venta en el marketplace, lo que permite a los compradores navegar por estos listados, comparar precios y comprar bienes. eBay facilita estas transacciones y garantiza un nivel de confianza y seguridad entre compradores y vendedores.
Plataforma
Una plataforma, por otro lado, es un concepto más amplio que va más allá de facilitar transacciones. Si bien también puede albergar transacciones, la función principal de una plataforma es crear una infraestructura o un ecosistema que permita diversas formas de interacciones e intercambios de valor entre múltiples partes. Estas interacciones pueden incluir el intercambio de bienes y servicios, pero también pueden implicar compartir información, crear y compartir contenido o cualquier forma de participación que aporte valor a sus usuarios.
Facebook, por ejemplo, es una plataforma que permite a los usuarios crear perfiles, compartir publicaciones, dar me gusta y comentar las publicaciones de los demás, unirse a grupos e, incluso, vender productos a través de Facebook Marketplace. La gama de interacciones va más allá de la compra y la venta, lo que convierte a Facebook en algo más que un marketplace.
Diferencias clave
Tipo de interacción
La diferencia más significativa radica en el tipo de interacción que facilitan. Los marketplaces son principalmente transaccionales y facilitan la compra y la venta. Las plataformas, sin embargo, permiten una gama más amplia de interacciones, desde transacciones hasta intercambio de contenidos y creación de redes, entre otros.Creación de valor
Los marketplaces crean valor al facilitar las transacciones entre compradores y vendedores. Por el contrario, las plataformas crean valor al permitir diversas formas de interacción e intercambio de valor entre los usuarios.Modelo de ingresos
Por lo general, los marketplaces obtienen ingresos a través de tarifas o comisiones por transacciones. Las plataformas, si bien también pueden obtener ganancias de las comisiones por transacción (por ejemplo, las tiendas de aplicaciones), suelen tener diversificación de las fuentes de ingresos, como publicidad (por ejemplo, Facebook), tarifas de suscripción (por ejemplo, LinkedIn Premium) o compras dentro de la aplicación (por ejemplo, las plataformas de juegos).
Si bien los marketplaces y las plataformas comparten similitudes a la hora de facilitar las interacciones en línea, se distinguen por sus funciones principales, la amplitud de las interacciones que facilitan y la forma en que crean y capturan valor. A medida que el comercio digital continúa evolucionando, estos modelos pueden superponerse e integrarse aún más, lo que crea formas híbridas que combinan los mejores aspectos de ambos.
Cómo elegir entre crear un marketplace o una plataforma
Elegir entre crear un marketplace o una plataforma depende de la naturaleza de la empresa, de tus objetivos para la empresa, del sector específico y del tipo de valor que quieras ofrecer. A continuación encontrarás una guía rápida paso a paso para ayudar a las empresas a tomar esta decisión:
Define tu modelo de negocio
El primer paso es definir claramente tu modelo de negocio. ¿Qué valor aportas y a quién? Si tu principal valor radica en facilitar las transacciones entre compradores y vendedores, un modelo de marketplace podría ser más adecuado. Si, por el contrario, tu empresa pretende permitir una amplia gama de interacciones que vayan más allá de las transacciones, como la creación de contenido, las creación de redes sociales o el intercambio de datos, un modelo de plataforma podría ser más adecuado.Comprende a tus usuarios objetivo
Ten en cuenta quiénes son tus usuarios y qué quieren. ¿Qué tipo de interacciones buscan? ¿Buscan principalmente comprar o vender productos o servicios? ¿O quieren un espacio para compartir contenido, aprender, conectarse o colaborar? Comprender las necesidades de los usuarios puede guiar la elección entre un modelo de marketplace y un modelo de plataforma.Analiza el panorama competitivo
Fíjate en otras empresas de tu sector. ¿Qué modelos están utilizando? ¿Hay algún vacío en el mercado que tu empresa pueda llenar? Por ejemplo, si tu sector está saturado de marketplaces, pero carece de plataformas que ofrezcan funcionalidades más amplias, crear una plataforma puede ayudarte a diferenciar tu empresa.Ten en cuenta tu modelo de ingresos
Los marketplaces suelen generar ingresos mediante el cobro de comisiones por las transacciones, mientras que las plataformas pueden tener flujos de ingresos más diversos, como publicidad, suscripciones o servicios prémium. Considera qué modelo de ingresos se adapta mejor a tu estrategia empresarial.Evalúa tus recursos
La creación de una plataforma a menudo puede ser más compleja y requerir más recursos que la creación de un marketplace debido a la gama más amplia de interacciones y funcionalidades involucradas. Evalúa tus recursos técnicos y financieros, y considera si tienes las capacidades para crear y administrar un marketplace o una plataforma.Escalabilidad y crecimiento
Las plataformas suelen tener una alta escalabilidad debido al efecto de red, en el que cada usuario adicional agrega valor al resto de la red. Sin embargo, también pueden exigir una masa crítica de usuarios para ser eficaces. Los marketplaces pueden ser más fáciles de poner en marcha y monetizar desde el principio, pero es posible que se enfrenten a más competencia. Considera tu estrategia de crecimiento y qué modelo se alinea mejor con ella.
Es importante recordar que estos modelos no son mutuamente excluyentes. Muchas empresas exitosas emplean un modelo híbrido, que comienza como un marketplace y agrega gradualmente funcionalidades de plataforma o viceversa. Por ejemplo, Amazon comenzó como un marketplace en línea, pero ahora también ofrece funcionalidades de plataforma como Amazon Web Services y Prime Video.
Al final, la elección entre crear un marketplace o una plataforma depende de tu estrategia empresarial específica, de tus recursos y del valor que quieras ofrecer a tus usuarios. Es una decisión importante que puede dar forma a la trayectoria de tu empresa, por lo que es crucial considerarla cuidadosamente.
El contenido de este artículo tiene solo fines informativos y educativos generales y no debe interpretarse como asesoramiento legal o fiscal. Stripe no garantiza la exactitud, la integridad, adecuación o vigencia de la información incluida en el artículo. Si necesitas asistencia para tu situación particular, te recomendamos consultar a un abogado o un contador competente con licencia para ejercer en tu jurisdicción.