El reto
A medida que Kickstarter se expandía a nuevos mercados internacionales, necesitaba crear filiales internacionales. Para ello, tenía que entender complicados códigos fiscales regionales y asegurarse de que cumplía las normativas. Por ello, buscó plataformas de pagos que le ayudasen a moverse por esos complejos fenómenos globales.
La solución
Kickstarter trabajó con Stripe para crear entidades locales en mercados nuevos para unir a creadores con patrocinadores. En cuestión de meses fueron capaces de expandirse y llegar a creadores de Hong Kong, Singapur y México.
Los resultados
Kickstarter utiliza Stripe para aceptar pagos con tarjeta de clientes de 195 países y ha financiado con éxito más de 160.000 proyectos.
Antes teníamos que crear filiales internacionales, asegurarnos de que estábamos al día con las normativas y códigos fiscales, y tener conjuntos adicionales de libros contables. Stripe nos ha evitado todo ese trabajo interno para que podamos centrarnos en nuestra misión de integrar a creadores y patrocinadores.