El reto

Cuando Califrais inició su andadura, 207.000 restaurantes, cafeterías y empresas de catering de Francia podían pedir al instante productos alimenticios seleccionados de los proveedores de Rungis. Pero, con la llegada de la COVID-19, la demanda se paralizó. «De la noche a la mañana, los restaurantes cerraron y dejaron de hacer pedidos», comenta Pierre Levy, CEO de Califrais. Mientras tanto, los consumidores, ya confinados, buscaban una forma de pedir productos frescos para comer en casa. Para responder a esta demanda, Rungis y Califrais necesitaban un socio que pudiera ayudarles de manera urgente a crear una plataforma que permitiera a los consumidores finales comprar productos de Rungis utilizando métodos de pago adaptados para un modelo de la empresa al consumidor.

La solución

Califrais creó una plataforma llamada Foodufrais y utilizó Stripe Connect para ofrecer una experiencia de compra intuitiva a los consumidores finales. Además, Stripe logró que Califrais ofreciera métodos de pago adaptados a los consumidores finales (en comparación con el modelo de los restaurantes). Ofrecer métodos de pago que los consumidores reconozcan y en los que confíen, como las tarjetas de crédito, es fundamental para la conversión.

Los resultados

Stripe Connect ayudó a Califrais a proporcionar servicio con rapidez. Los compradores no solo podían pedir frutas y verduras con tan solo unos clics, sino que la implementación de Foodufrais al completo apenas duró 10 días. Según Simon Bussy, CTO de Califrais, la velocidad de integración fue crucial para poner en marcha el proyecto. Foodufrais hace casi 1.200 entregas diarias en París. Un mes después del lanzamiento del servicio, el tamaño medio de la cesta ha alcanzado los 110 €, y alrededor del 40 % de los clientes regresan regularmente a la plataforma para comprar alimentos frescos de los proveedores de Rungis.

Prepararse para escalar de forma masiva

La popularidad de Rungis también significaba que la nueva plataforma debía tener la capacidad de escalar inmediatamente después de su lanzamiento. Califrais tuvo que crear una estructura tecnológica potente que pudiera soportar los picos de 80.000 visitantes conectados a la plataforma web al mismo tiempo. «La fiabilidad era fundamental para nosotros y, gracias a Stripe, los pagos eran 100 % estables», señaló Bussy.

Combinar los modelos de negocio en un servicio fluido

Adaptar un servicio que normalmente está dirigido a los restauradores y ponerlo a disposición de los particulares durante la pandemia no ha sido fácil, pero el éxito de Foodufrais y Rungis resulta realmente alentador. Califrais tiene previsto expandirse y crear un nuevo centro en Bruselas. También tiene previsto entrar en los mercados regionales de toda Francia, haciendo crecer el modelo de negocio para atender la demanda más allá del área metropolitana de París.