PROPOSICIÓN C

Los asuntos relacionados con la Proposición C de San Francisco son tan importantes que consideramos que debíamos explicar con más detalle los motivos de la oposición de Stripe a la misma.

En Stripe estamos plenamente comprometidos a ayudar a resolver el problema de los sin techo. Por ello, estamos encantados de pagar más impuestos, una posición que hemos dejado clara desde el principio. Los empleados de Stripe, y la propia Stripe, llevan mucho tiempo trabajando para ayudar a las causas relacionadas con la vivienda y a los proveedores de servicios para personas sin hogar.

Si la indigencia fuera solo una cuestión de dinero, este problema ya estaría resuelto. Aunque las ciudades no informan detalladamente sobre estos asuntos, San Francisco gasta actualmente unos 430 dólares estadounidenses por habitante de la ciudad al año en servicios y programas para los sin techo, frente a los 260 dólares de Nueva York y los 110 dólares de Los Ángeles. Sin embargo, el problema en nuestra ciudad es peor y, pese al aumento del gasto, ha seguido empeorando.

La indigencia surge por varias causas complejas, y para solucionarla hay que intervenir de forma cuidadosa. Como muchos otros, no creemos que la proposición C, que llevaría a San Francisco a gastar 770 $ por persona al año, resuelva con eficacia el problema. Aunque está bien intencionado, este es el mayor aumento fiscal de la historia, y no viene acompañado de cambios sistémicos ni de una rendición de cuentas efectiva.

Cualquiera que afirme que la Proposición C es una cuestión de estar "a favor o en contra de las personas sin techo" está vendiendo una falsedad. La Proposición C cuenta con la oposición de la alcaldesa London Breed, el senador estatal y exsupervisor Scott Wiener (cuya declaración vale la pena leer), el supervisor David Chiu y el SF Chronicle. El exalcalde de San Francisco (y probable próximo gobernador de California) Gavin Newsom afirma que la aprobación de la Proposición C empeorará el problema de los sin techo en San Francisco. En privado, muchas personas y políticos que trabajan directamente en causas relacionadas con los sin techo también se oponen a la Proposición C. Estas personas no están en contra de los sin techo.

Debido a la actual visibilidad de la industria tecnológica, es fácil ver esto como un problema tecnológico. Sin embargo, las empresas tecnológicas no son las que se enfrentarán a los mayores retos. De hecho, las empresas de software están entre las menos afectadas. Según la propia Oficina de Desarrollo Económico y Laboral de San Francisco, la Proposición C afectaría de forma desproporcionada a los empleados de los puestos de trabajo de nivel medio, como el personal administrativo de las empresas de comercio minorista y los trabajadores de las tiendas de comestibles.

En junio elegimos a London Breed, la primera mujer afroamericana en ser alcaldesa de la ciudad. Solucionar el problema de los sin techo fue uno de los principales puntos de su campaña. Antes de su victoria, publicó un exhaustivo análisis de 4.000 palabras sobre el problema. Conoce el problema en toda su extensión.

Estamos impresionados con los esfuerzos de la alcaldesa Breed y nos oponemos a este intento de sustituirla, menos de seis meses después de su toma de posesión. La posición de Stripe es que el problema de los sin techo debe ser resuelto por la alcaldesa y por la administración de la ciudad, y seguiremos colaborando activamente con su gabinete.

Una solución liderada por la alcaldesa requerirá casi con toda seguridad un aumento de los impuestos. Aceptamos esa responsabilidad y estamos dispuestos a trabajar con ella y un amplio grupo de partes interesadas de San Francisco para elaborar una respuesta integral a nuestra crisis de los sin techo.

Con problemas tan complejos como el de la falta de vivienda, rara vez hay respuestas evidentes. Cualquiera de nosotros podría estar equivocado. Hoy en día, el mundo nos empuja hacia un discurso polarizado y un análisis cargado de emociones. Todos conocemos a las partes involucradas. Creemos que es importante resistir.

— Patrick Collison, CEO y cofundador