Simplificación de la cadena de suministro con Maersk
El gigante mundial de la logística aprovecha las nuevas tecnologías para facilitar los envíos en todo el mundo
Los icónicos contenedores de acero corrugado de transporte de Maersk se conocen en todo el mundo: se amontonan sobre cargueros, forman altas pilas en los puertos y se transportan en remolques de tractores mientras completan su viaje de un extremo al otro de la cadena de suministro.
El propio Maersk también ha vivido un viaje. El gigante de la logística fue fundado en Svendborg (Dinamarca) en 1905 por el capitán marítimo Peter Mærsk Møller y, a lo largo del siglo XX, se creció hasta convertirse en una de las empresas que cotizan en bolsa más valoradas del mundo. Actualmente, su amplia red de logística se extiende por 130 países y todos los años mueve decenas de miles de millones de dólares en mercancías por todo el mundo.
Maersk sigue teniendo éxito porque ha descubierto cómo cambiar. El mundo moderno se parece poco al mundo en el que se creó Maersk y la industria logística en general ha tardado en adaptarse. Sin embargo, en una época en la que muchos operadores siguen trabajando en papel, se comunican por fax y realizan transacciones en efectivo, Maersk ha modernizado su infraestructura económica, en parte con ayuda de Stripe.
El auge del transporte de mercancías
Un día cualquiera, se entregan 85 millones de paquetes y documentos en todo el mundo y el 80 % del volumen de ventas total se mueve por mar. Con una carga de trabajo tan grande (y cada vez mayor), dos tercios de las empresas de logística reconocen la necesidad de seguir transformando sus operaciones para mantenerse al día. Pero Maersk se dio cuenta pronto de que debía renovar su infraestructura.
«Hace unos pocos años iniciamos este viaje, porque sabíamos que era el futuro y queríamos modernizarnos y servir mejor a nuestros clientes. Teníamos que simplificar el envío y el seguimiento de los pedidos de una parte del mundo a otra con un mero clic de un botón», destacó Navneet Kapoor, director de tecnología e información en Maersk.
Como parte de su estrategia de modernización, Maersk necesitaba encontrar al socio perfecto para un elemento clave de sus operaciones: los pagos internacionales. El negocio mundial de la empresa es intrínsecamente complejo, con requisitos bancarios, divisas y métodos de pago preferidos, que varían de una región a otra. Un mismo enfoque para todos no iba a funcionar, por lo que Maersk recurrió a Stripe.
«Sabíamos que los clientes querían trabajar con nosotros, cuando quisieran y como quisieran», destacó Kapoor. «Crear un sistema de pagos que permitiese esta flexibilidad era una pieza esencial del puzle. Nos dimos cuenta de que Stripe tenía la infraestructura moderna adecuada y de que era el socio mundial perfecto para ayudarnos a conseguirlo».
Un socio de confianza
Antes de asociarse con Stripe, las operaciones de los pagos de Maersk estaban fragmentadas entre varios proveedores: uno para la tokenización, otro para el procesamiento de pagos y un tercero para la gestión de la autenticación de seguridad. Hacer malabares con varias soluciones que no siempre eran interoperables introducía fricciones innecesarias en una configuración que ya era compleja.
Gracias a Stripe, Maersk combinó estos sistemas dispares en un único y ágil portal de pagos. Ahora, los clientes de Maersk pueden pagar sin problemas mediante un Dashboard intuitivo que admite los métodos de pago que antes Maersk no podía aceptar, como las tarjetas de créditos. El portal también se adapta a los requisitos bancarios regionales y ofrece experiencias de punto de venta localizadas a los clientes internacionales.
«La priorización local es fundamental para satisfacer las necesidades de nuestros clientes. Desde el principio y durante momentos increíblemente decisivos, Stripe nos ha apoyado para garantizar que nuestra infraestructura funcione a la perfección en varios mercados», señaló Kapoor. «Este enfoque se volverá cada vez más importante conforme sigamos expandiéndonos y cimentando nuestra posición como líder mundial en logística».