El desafío
Gracias a la creciente demanda de los últimos años, Slack se ha expandido para prestar servicios a más clientes internacionales, entre los que se incluyen grandes empresas como Amazon, IBM y HSBC. Para hacer frente a este crecimiento, Slack necesitaba activar pagos con tarjetas de crédito y por transferencia ACH internacionalmente; automatizar un sistema de facturación por consumo, personalizado por cliente, que aceptara múltiples métodos de pago; permitirles a los clientes ajustar la frecuencia y los planes de facturación, y aplicar impuestos en cualquier lugar del mundo. En resumen, debían ofrecer a sus clientes una experiencia de compra incomparable.
Slack llegó a la conclusión de que encargar el diseño de esta experiencia a su propio equipo supondría desviar gran cantidad de recursos de ingeniería de su producto principal. En consecuencia, Britt Jamison, directora de producto de Slack, se preguntó: "¿Podemos ofrecerles algo mejor a nuestros clientes si dejamos en manos de Stripe la gestión de las áreas en las que son expertos y nosotros nos centramos en lo que sabemos hacer?".
La solución
Slack estableció que, al asociarse con Stripe, podría diseñar la experiencia de pagos para grandes empresas que sus clientes necesitaban sin tener que renunciar a sus prioridades. En palabras de Jamison: "Tardamos aproximadamente dos semanas en finalizar nuestro lanzamiento inicial. Durante ese tiempo, los equipos de soporte y despliegue de Stripe fueron nuestros asesores expertos en la materia. Compartimos con ellos un canal de Slack desde el que nos ofrecieron ayuda, consejos y las mejores prácticas sobre pagos a la hora de aceptar nuevas monedas en otros países".
Slack implementó Stripe Payments, Billing, Radar (prevención de fraude) y Sigma (informes a través de SQL). "Contar con un sistema de facturación que te da agilidad para responder a las necesidades del cliente es crucial. Stripe ofrece esa flexibilidad", declaró Jackie Rocca, directora de producto.
Los resultados
Los millones de personas que tuvieron que adaptarse al trabajo remoto durante la pandemia de la COVID-19 dispararon la demanda y el uso de Slack. Para asegurar que la experiencia de millones de usuarios fuera satisfactoria, definir las prioridades de los recursos internos resultó más importante que nunca. Durante todo ese tiempo, con un volumen de usuarios que estaba batiendo récords, Slack consiguió un tiempo de actividad de la plataforma de prácticamente el 100 % y pudo lanzar funcionalidades imprescindibles que figuraban en su ambiciosa hoja de ruta. Gracias a la decisión de delegar todas las tareas relacionadas con los pagos a Stripe, Slack pudo dedicar todos sus recursos de ingeniería a su producto principal.
Stripe ayudó a Slack a configurar y optimizar los pagos en 15 países, implementando métodos de pago locales para aumentar las tasas de autorización e incrementar los ingresos de Slack que, en el año fiscal 2020, alcanzaron a ser de 630 millones de dólares. Stripe también le permitió recuperar recursos de ingeniería de forma permanente: gracias a Sigma, el equipo de contabilidad de Slack recibe informes que incluyen preguntas relevantes de los clientes sobre la facturación justa, lo que ha reducido el tiempo que el equipo de ingenieros dedica a responder consultas de los clientes sobre el uso de la plataforma.
Tomemos cualquier empresa más grande que la nuestra. Todas usan varios procesadores de pago, si bien es cierto que Stripe no existía cuando estas empresas empezaron a crecer. Creemos que no podemos quedarnos solamente con lo que hicieron estas empresas antes que nosotros, porque ahora existe Stripe. Confiamos en Stripe, tanto por su plataforma como por su visión a largo plazo.