Ahora que es más fácil controlar el uso de nuestro producto de forma precisa y en tiempo real, más empresas están ofreciendo precios según el uso como una forma de crear una ventaja competitiva y atraer a una base de clientes más amplia. Los modelos de precios dinámicos también ayudan a las empresas a gestionar mejor los flujos de caja al aprovechar la IA y la automatización para ajustar los precios en función de las fluctuaciones de la demanda.

La implementación de soluciones propias puede parecer atractiva al principio. Sin embargo, resulta fácil subestimar la complejidad de los sistemas empresariales, y el coste de desarrollo inicial es solo la punta del iceberg. Con el tiempo, las empresas con modelos de suscripción tienen que lidiar con gastos recurrentes relacionados con mejoras de funciones, optimización del rendimiento, actualizaciones a la infraestructura tecnológica, mejoras de seguridad y más.