Banca segura y protegida en cuestión de minutos con N26

El banco digital europeo utiliza Stripe para recargar las cuentas con fluidez

N26 no es un banco como los demás. No tiene cajeros ni sucursales bancarias. Nunca hay que hacer cola. En lugar de ello, en ocho minutos en la aplicación móvil de N26 puedes abrir una cuenta con una gama completa de funciones: cheques, ahorros, transferencias, domiciliaciones, etc.

Pero los clientes son bastante reacios a cambiar de banco. E incluso las personas que sienten curiosidad por las formas más modernas y prácticas de la banca todavía se desaniman fácilmente en cuanto se topan con problemas a la hora de adoptar estas nuevas aplicaciones. Conscientes de ello, en N26 sabían que debían encontrar la manera de invitar a nuevos clientes a hacer el onboarding de manera fluida y cumplir al mismo tiempo con la normativa local. Para ello, acudió a Stripe para simplificar una parte crucial del proceso: las recargas de las cuentas, mediante las cuales los clientes añaden fondos a sus cuentas.

Al contar con esta parte importante de su interfaz bancaria, durante los últimos nueve años N26 ha desarrollado una banca digital sencilla, accesible y con licencia completa que ya se usa en 24 países de todo el mundo.

«Stripe es una parte fundamental de nuestra experiencia del producto. Significa un paso adelante muy importante en la experiencia de onboarding, lo que nos permite atraer a nuevos clientes de manera rápida y sencilla», señaló Amaury Hellebuyck, socio de operaciones empresariales de N26.

Transformación de la experiencia bancaria

En 2013, Valentin Stalf y Maximilian Tayenthal, amigos desde la infancia, fundaron N26 partiendo de la idea de crear un banco que a la gente le encantase usar. El nombre de la empresa se refiere a los 26 cubos más pequeños de un cubo de Rubik completo y eligieron ese nombre porque, si se conoce la secuencia correcta de movimientos, se puede resolver un cubo de Rubik con rapidez y elegancia, lo que evoca la simplicidad que esperaban llevar al complejo mundo de los bancos.

Una parte esencial de cualquier experiencia de banca es añadir fondos a tu cuenta. La manera tradicional de recargar una cuenta es realizar una transferencia SEPA (siglas en inglés de Zona única de pagos en euros), que requiere que tanto el banco del remitente como el del destinatario estén registrados como miembros de SEPA. N26 quería ofrecer otra opción que fuese rápida, sencilla y lo suficientemente flexible como para trabajar con una amplia gama de métodos de financiación.

Stripe la proporcionó. En solo seis semanas de desarrollo, N26 pudo ofrecer varios métodos de pago a sus clientes, entre los que se incluían las tarjetas de crédito, las tarjetas de débito y las recargas por monedero digital, todos ellos integrados directamente en la aplicación del banco. Ofrecer varias opciones significa que los usuarios pueden transferir dinero de manera sencilla con solo unos toques en la pantalla y sin tener que registrarse en varias aplicaciones.

Al contar con las optimizaciones del flujo del proceso de compra de Stripe, los nuevos usuarios de N26 empezaron a recargar sus cuentas mucho más rápido que antes. La sencillez y la velocidad se tradujeron directamente en clientes a largo plazo: la base de clientes de N26 se ha disparado de un millón en 2018 a más de siete millones actualmente.

Crecimiento a nivel internacional

Una vez establecida la infraestructura adecuada, N26 tiene previsto expandir sus productos a nuevos sectores y centrarse en ofrecer un servicio excepcional a su base de clientes creciente. Ha acelerado su crecimiento en Europa mientras sigue adaptándose a las tendencias emergentes y las necesidades del cliente.

«Elegimos Stripe porque tiene una mentalidad tecnológica que se alinea en gran medida a la nuestra. Este es un aspecto importante para que N26 pueda adaptarse a un panorama bancario en constante transformación. Con un compromiso compartido con la innovación, esperamos atraer fácilmente todavía a más personas al negocio online», destacó Hellebuyck.